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Extensión
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5 fojas
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Resumen
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Bush y Salinas se reunieron en Agualeguas, enfocándose en la relación bilateral, el Tratado de Libre Comercio, y temas sensibles como la inmigración y el narcotráfico, hubo cordialidad y entendimiento entre ambos mandatarios..
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Tipo
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Borrador
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Clasificación
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UAMC.MAGC.01
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Sububicacion
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Sobre
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Texto completo
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es~ecial
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para E~ Norte, edición del 26 de novie mbre de 1990
.. '
.
Busn en Agualeguas
miguel ángel granados chapa
La quinta reunión de los Presidentes Bush y Salinas, en Monterrey y en
Agualeguas, se realiza en un ambiente de gran cordialidad personal, y por primera vez en mucho tiempo, en un marco de entendimiento que tenderá a crecer en
el futuro, aunque como es natural no falte n problemas de importancia.
Puede decirse que Bush~ y Salinas son amigos. No sólo se han e ncontrado
repetidamente, sino que están en frecuente contacto telefónico y postal. Conversan no sólo acerca de los temas bilaterales, sino del contexto internac io nal . Esa vinculació n amistosa cuenta mucho, pero no debe ser confundida con la
relación diplomática, mucho má s compleja y. dificil de desarrola~r. No obstante ,
si se recuerdan las desavene ncias entre López Portillo y Carter, por ejemplo,
y a un el trato difícil de Reagan y De la Madrid, debido a la personalidad del
Presidente norteamericano, se apreciará bien la ventaja de que concuerden lo s
caracteres de los Jefes de Estado.
Naturalmente, el tema principal de la agenda futura entre MéHico y los
Estados Unidos es el acuerdo de libre comercio que está negociándose entre los
dos países. Cuando se reunieron por 6ltima vez, en junio anterior, los dos presidentes pidieron a sus secretarios de Comercio, Jaime Serra Puche y Carla
Hills, que estudiaran el asunto . Ambos produjeron, en agosto, la recomendación
de iniciar negociaciones formales, y la petición respectiva -fue formulada por
las siguientes semanas . En
el ma ndatario mexicano e~ septiembre xigRiRNXE Bush comunicó esa situación al
·Congreso, en procura de su autorización para el acuerdo. Dos comités del Congre
so estudian la petición, y deben manifestarse sobre ella dentro de un pla zo de
sesenta días legislativos, esto es, en que esté reunido el Congreso, lo cual
no ocurre en este momento. Por eso, el plazo termina en la primavera pr6xima .
No obstante que las elecciones legisiativas norteamericanas del seis de
noviembre modificaron _la integración del Congreso, en perjuicio del Partido Re ·publicano y, por ende, de Bush, la alteración no es de tal grado que imp l icara
a gua ~
JR S/2
..
·freno L· l os proyectos de Bush. Buede esperarse, razonablemente, que se le dé
solicitada,
la
autor ización,/lo que es s0lo el primer paso para confeccionar el acuerdo. Los
rit mos int ernos de la negociación se verán afectados, para acelerarlo o para
demorarlo, por dos circunstancias ajenas a los países interesados. En bien del
acuerdo entre México y Estados Unidos obrará el hecho de que .la Iniciativa de
las Américas , el gran proyecto diplomático de Bush para este continente, busca
prese ntar como ejemplo y punta de lanza la negociación con México. Si ésta sale
bien, y pronto, la Iniciativa de las Américas prosperará en términos semejantes.
En camb io, el interés de Canadá Por participar en las conversaciones sobre el
- libre comercio de sus vecinos puede retrasar levemente
la negociación. A ese
respec to, sin embargo, Bush ha sido claro. En una declaración reciente dijo que
"si podemos ampliar este acuerdo para que incluya a Canadá, estará bien (pero)
si . ~l
esfuerzo por ampliar
el proceso resulta que no puede ser viable, o que
producir ía de moras inacepta bles, entonces procederíamos bilateralmente con México".
La negociación en sí misma no será un proceso ter~o_, por la diversidad
de los intereses afectados, pero no parece que se enfrentará
a obstáculos infran
queables. Uno que hubiera podido serlo, el del abordamiento del tema petrolero,
fue quizá ya resuelto. Ambos Presidentes han manifestado que la propiedad y el
control de México sobre los ~t~X!li~ hidrocarburos no es parte de la negociació n . Salinas lo dijo de modo expreso en su segundo informe. En entrevista
con Notimex, Bush concordó con eu colega: "reconocemos la dterminaci6n de México
por controlar la propiedad de sus propios recursos", - pero apuntó el rumbo hacia
el c ual pueden orientarse las negociaciones: "Creo que hay áreas importantes
e n las que podemos trabajar juntos y que ser'ian mutuamente ventajosas para
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ace ntuar las inversiones y la exploración de petróleo y gas natural •
Otros dos temas de importancia en el desarrollo futuro de las relaciones
entre México y Estados Unidos son la inmigración y sus secuelas, y el narcotráfico.
EX~~~ Ambos son de difícil abordamiento porque no suponen 6610 accio-
aguaíegua.
nes gube r namentales, a las que pueden comprometerse las autoridades, sino i mplican un cl i ma social cuya modificación ofrece obstáculos de gran consideración .
El ambie nte contrario a los mexicanos en los estados, como California, donde se
registra una gran presepcia ae inmigrantes i ndocumentados, ha ido recrudeciéndose. La violencia, espontánea u organizada contra los "mojados" puede ser disminuida mediante una intervención puntual ~e los mecanismos de protcción a cargo
de los consulados mexicanos, pero ~EO§:E{ su eliminación p reducción sustancial
requeriría una i mposible mudanza de . los sentimientos y de las percepciones que
los WASP (blancos, sajones y protestantes) se for man respecto de los buscadores
de e mpleo morenos y distintos a ellos. No se prevé, por otra parte, que disminuya el fl ujo de migrantes mexicanos, sirio al contrario. Dadas las condiciones
económicas en nuestro país, especialmente en el campo, el curso probable de la
migración será de increme ntos considerables, lo cual agravará el problema porque, en sentido contrario, las dificultades a que ya se enfrenta la economía
norteamericana, que puede caer en la fra nca recesión, achicarán el mercado de
traba j o y aumentarán las tensiones.
También en el narcográfico puede aumentar el riesg9 de rozones entre los
dos países. Es verdad que se ha operado un vuelco muy significativo en la actit ud normaamericana, que ha dis minuido los problemas que antaño perjudicaron la
relación. Washington ha admitido por fin el enfoque que atribuye gran responsabilidadK al mercado de consumo, en vez qe concEntrar la culpabilizaci6n en los
productores o países de tránsito. Pero eso no es suficiente. La política contra
los estupefacientes está sufriendo grandes reveses en los Estados Unidos, al
grado de que Bennett, el encargado por Bush de combatir con amplísimos poderes
el tráfico de drogas, se dio por vencido .y renunció a su cargo. Mientras tanto,
el consumo y la criminalidad asociada a ese flagelo, van en aumento, Y ello
gen era complicaciones en la relación con nuestro país.
En ese mi s mo terreno sigue abierta una he rida que, si no es tan ancha como
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para envenenar el encuentro de hoy y mañana entre Bush y Salinas, sí es digna
de consideración . Se trata del tod~vía inconcluso secuestro del doctor .Humberto
Alvarez Machain . Aun más importante que la _suerte personal del involucrado, al
que debe tenerse por víctma _,a,unque se probara su parti. cipación en los delitos
de que se le ac usa, porque i~e capturado en violación a la l~y, es el hecho de
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que Was h ington es t á ha~iendd valer su absurda idea de que el brazo de su justicia puede ser tan l argo como sus exigencias lo requiera~ , sin respeto a la soberanía de los pa íses. Ante tal caso, el gobierno de Bush, y él mis mo, se ven en
la situación de practicar un doble lenguaje. Por un lado, no ~ueden ignorar la
justeza de los reclamos mexicanos, pero por otra parte no llegan a entender con
cabalidad el fu ndamento de esos reclamos, ·pues encuentran natural el poder desplazarse por el mundo sin onstáculo alguno.
a
En un contexto más amplio, han despar~cido de la relación entre México
y estados Unidos motivos de fricción que fueron muy enojosos, como actitudes
mexicanas en la política exterior. Votos en ciertos sentidos en las Naciones
Unidas o la Organización de Estados Americanos,
o la actitud mexicana ante
·,
Centroamérica, especialmente Nicaragua y El Salvador, favorecían la _expresión
de posiciones encontradas y su secuela de malos entendidos. Pero el sandinismo
ya no gobierna en Managua y aun si lo hiciera es seguro que el apoyo mexicano
a esa causa hubiera declinado, como disminuyó la solidaridad que el gobiernp
llegó a ofrecer a los insrugentes salvadoreños, y que lleg'o al punto de tenerlo
junto con Francis como parte beligerante.
La recomposición del mundo ayuda, asimismo, a la tersura de las relaciones
entre los dos países. México no puso nunca en duda sus lealtades occidentales,
pero se inclinaba por mejorar sus relaciones con el mundo socialista. Y aunque
Washington lo hiciera también: fue amigo de la China Popular aun antes que México, lo cierto es que en conjunto la percepción que la diplomacia mexicana .tenía de la guerra fría no ~esultaba por entero del agrado del Departame nto de
Estado.
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Asi pue s, ha brá cordiali daj en esta rau~ ió :1 j Cuando la casa solarie~a
de los Salinas en Agualeguas se abra para recibir al ilustre visitante, se
estará practicando un acto de reciprocidad, en respuesta al g~sto a mistoso de
los Bush, que en cotubre del año pasado invitaron al Presidente de México y
de ·descanso
a s u esposa a su casa ~~K*I~~K en Camp David. Se manifest~rán, además, respeto .. De hecho, ya lo han manifestado inmed ;Latamente a ntes de la reunión.
Bush dijo que "Estados Unidos y México valoran. su I!EíiDQUQUi individualidad pero se dan c uenta de que uno no necesita sacrificar su identidad para
vivir e n ar me nia con sus vecinos" Y aggregó un franco elogio a su anfitrión:
"El Presidente Salinas está ampliamente reconocido
en el mundo como un lider
creativo y diná ico, y yo agradezco la ·oportunidad · de compartir ideas con él
y buscar soluciones a nuestros problemas comunes. Ansío disfrutar la hospitalidad del Presidente Sal inas y la opo tune> dad de revisar con él esta agenda.bilateral. Tendremos la oportun idad de hacerlo en reu niones !~ privadas y de
trabajo con aS$SOres clave".
Salinas, por su parte, había dicho el primero de noviembrelt: "Con los
Estados· Unidos de Am'erica buscamos una interacción _que reconozca· la importancié
de la relación bilateral para ambos países, destacando el diálogo, el respeto y
la reciprocidad. Se ha insistido e n el equilibrio de las relaciones comerciales ;
y financieras,en una cooperación
mejor en la lucha contra la delincuencia y el
narcotráfico, escrupulosa de la soberanía, del derecho internacional, de la buena fe. Hemos demandado un trato justo y humano para los indocumentados,.y.Duran
te el mes de ounio realicé una visita a Washington. En esa ocasión traé con el
Presidente Bush los temas de la agenda biltaeral y ~n particular los aspectos
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,ás alentadores del comercio entre los dos pa1ses
Sin embargo, no podemos engañarnos; La pura disparidad entre las dos
sociedades vecinas engendra problemas que no pueden ser eliTiinados por la diplo
macia y la política. Mientras esa desigualdad subsista el riesgo de fricciones
y abusos estará siempre presente.
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Materia
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Relaciones México-EEUU
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Tratado de Libre Comercio
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Inmigración
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Narcotráfico
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Diplomacia
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Cooperación bilateral
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Reunión presidencial
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Conflictos fronterizos
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Soberanía
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Seguridad nacional
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Persona o institución mencionada
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George Bush
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Carlos Salinas de Gortari
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Jaime Serra Puche
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Carla Hills
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Congreso de Estados Unidos
-
México
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Estados Unidos
-
WASP
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Humberto Álvarez Machaín