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Extensión
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5 fojas
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Resumen
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La invasión de Kuwait por Irak, el papel de Saddam Hussein y la reacción internacional, especialmente de Estados Unidos, Generaría Implicaciones económicas y diplomáticas..
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Tipo
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Borrador
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Clasificación
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UAMC.MAGC.01
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Sububicacion
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Sobre
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Texto completo
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•
especial
para El Norte, edición del
t
4 de diciembre de 1990
¿Sangre o petróle.o?
miguel ;angel granados chapa
Hasta hace cuatro meses, Kuwait era casi el paraiso. Era un país don de
mayor
no se pagaban impuestos y el ingreso per cápita era unas s i ete veces ~~~liXque
el de México . Brev.e porción de tierra, tres veces más chico que el estado de
N ~ evo
Leó n y u n poco menor que el de Hidalgo, había más extran jeros que naciona -
les en su suelo, atraídos aque llo s por los elevados sueldos que se cubrían a
trabajadores calificados y funcio nario s de diversas especialidades. Pero eso
que
se acabó cuando las tropas de Irak invadieron al minúsculo país vecino ~ poco
después fue a nexado. Desde entonces, el mundo vive e n vilo, esperando el momentc
de que estalle la guerra, una guerra que te ndría probable me nte alcances mundiales. Por lo pronto, hoy sabemos que ese conflicto no estallará antes del quince
de enero, por lo menos en lo que toca a una de las partes.
Contra Irak, y contra su líder Saddam Hussein se han levantado airadas
toda s uerte de voces . Difícilme nte se encontrar í a nada que alegar e n su favor,
pero conviene exami nar el asunto con alguna frialdad, al menos para no i maginar
que estamos en la víspera de una lucha entre el bien y el mal, sino que ambos
términos andan algo mezcladitos en este asunto . Tanto es así, que la opin ión
pública nortea mericana es renue nte a participar en una guerra ya, que dice bue na parte del público, no se les hace que sea buen negocio can jear sangre por
petróleo.
Hussein es i ndefe ndible, sin duda. Ejerce un poder dictatorial, basado
en la represió n y en el dominio que ~~~li~ mant i ene sobre el Ejército, la única
f uerza real e n la antigua Mesopotamia. Aunque formalme nte Hussein pertenece al
par tido Baath, que e n los sesentas proclamó el socialis mo islámico, el régimen
que e ncabeza no tie ne nada de uno ni de lo otro. Ha preservado el poder hace una
doce na de años, siempre sobre la base de depurar los cuadros militares y políticos que alcan zan alguna personalidad propia.
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~petróleo/2
Ha e mpl eado las amplias posibilidades petroleras de su país no en promoveJ
bienestar para la població n ~ sino para edificar un vasto y sólido poder militar:
que lo ha convertido en la potencia castrense de la zona . Dispone de un millón
de soldados~ mie ntras que Turquía y Egipto~ que tamb ién se distinguen por su
fuerza armada~ cuentan apenas con 650 mil y 448 mil soldados~ respectivamente.
Irak tiene dos veces más tanques que Egipto ( 5~550 contra 2,425) y está al parej o con esos dos países e n lo que hace a aviones de combate . Adicio nal mente, Ira}
cuenta con dos arsenales que no tiene n comparación . Uno de armas
que es
sobresalie n te~
qu í m icas~
en
y probablemente también otro nuc lear~ pues si bien Israel
bombardeó e n 1981 un reactor que era la base de la experiencia nuclear iraquí,
nada i ndica que en ese lapso no haya podido rehacer su fuerza en esa materia.
Hace diez años~ Irak i nició una guerra~ la del Golfo~ contr a Irán . Fue
una lucha encar n izada~ donde ciudades y no objetivos militares fuero n bombardeadas. La pelea cesó de
súbito~
después de pérdidas sin fin por ambas partes~ y
ahora con motivo de la actual crisis amba s nac ione s pa recen haber olvidado sus
querellas y actuan co mo aliadas . Tanta sangre derramada para nada: esa co nducta
errática parece estar prese nt e de nuevo en la situación presente.
Irak alega que Kuwait es parte suya. Es un argumento que puede defendersE
región
o contradecirse . Esa ~~~* fue modelada, al fi nal del siglo anterior y comienzos del presente, por los i ntereses coloniales britámicos, especialmente alerta
en la co marca desde que el petróleo adquirió un valor comercial atractivo. Kuwait existe sólo a partir de 1961, y su creación no obedeció a movi miento étnicc
o social alguno, sino a la pura conveniencia me rcantil. Un experto museógrafo
mexicano, el maestro Iker Larrauri, trabajó no ha ce mucho, seguramente bajo estipe ndios esplé ndidos, en la construcc ión de un mu seo kuwaití, que busca dar
a esa nació n alguna seña de identidad, recogiendo la huella de quie nes poblaron
la comarca e n siglos ~X~XI pr~tétitos, tengan o no que ver realmente con el
país actual. En el año mismo de la creac ión del e mirato como nac ión soberana,
Irak lo i nvadió, para i mpedir lo que entend í a desde entonces como una mutilación
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de su territorio . La ocupació n entonces no tuvo éxito, fue efímera y se convirtió e n una h echo cmns umado la aparició n del nue vo Estado . Pronto fue ad mitido
e n la ONU. Y todo pa ra asegurar una fue nte de petróleo extraordinaria , pues
Kuwait está ase ntado sobre un verdadero l a go de petróleo . Aunque produce menos
petróleo que México, casi no con sume nada y por lo tanto es una potenc i a expor -
tadora . Por añadidura, a raíz de la crisis petrolera de 1973, orie ntó sus utili dades a las fi nanzas, a través de la Kuwa it I nvestment Office (KIO ) ,
que ha
desplegado e n los últimos quince años una actividad tan intens a que los i ngreso¡
financieros de Kuwai t lle garon a ser mayores, en 1987, que los provenientes di rectame nte del petróleo : 6400 millones de dól ares contra 5,300 . KIO tie ne buen
o j o, pues posee ~ a cuarta parte de las a cciones del con sorcio químico a lemán
Hoec hst, un qui nce por ciento de Da i mler Ben z, otro t anto de la British Petró leum , etc .
Después de s u desarreglo de 1 961, I r a k y Kuwait lle garon a ser alia dos, es -
pecialme nte en el ant agon is mo ár abe c ontra I s rael (trop a s de a mbas nacion es combaitero n juntas en l a guerra de Yom Kippur de 1973 ) y en la estéril guerra del
Golfo. Eso no elimi naba, sin embargo, l as tensiones fronterizas n i las friccio nE
entre los dos pa íses, que pudieramos llamar herma no s . Sus i ntereses tendían h ac j
a gravó
focos distintos, y X~ l a situació n se ~ ~li~ desde el comienzo de este año por
la des mes ura con que los jeques de Kuwa it quisieron servirse con l a cuchara grar
de e n el mercado petr olero . Contra riando las nor ma s de l a OPEP, Kuwa i t aumentó
s u prod ucció n y con es o c ontrib uyó a abatir los precio s , lo que sign ifica un
drama para Irak, que no tie ne ingresos extran jeros por prá cticame nte nada que nc
sea petróleo.
En ese cuadro sobre ino el ataque de principios de agosto . A partir de
ent onces se h a desata do una guerra de propaganda, y se ha n acelerado los apres tos para una de verda d. Estados Un idos ha hec ho de punt a de lan za, como si hu -
biera sido agredido directamente. Y es que la cuamtía de los interes e s petrolerc
e n j uego y , adicionalme nte, el mal e j emplo que pue de deriva rse de la apa rición
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de un ele mento poderoso e insubordinado en una escena mund ial donde había sido
conc l uida la guerra fría, es algo que Washington no quiere tolerar . Por eso
amontonó tropas e n Arabia Saudita, y buscó desde el princ ipio concertar una ac ción mundial que castigara al gobierno de Bagdad y respusiera e n sus palacios
a los j eques kuwaities, que t uv ieron tie mpo de ponerse a salvo y disfrutan su
legendaria riqueza en Europa.
Pero la situación se ha empantanado . Ni siquiera la guerra sicológica
ha sido ganada por los Estados Unidos . Es cierto que su estrategia logró conver tir a Saddam Hussein en un demonio, en el e ne migo prácticamente universal . Y es
que, como h e mos dicho, Hussein era indefendible desde antes de i nvadmr a
Kuwait
Pero la hipocresía no rteame ricana, y la del mundo en general frente a esa agrre sión no pu ede ser ocultada . Es poco creíble el alegato norteame ricano cuando no
se desnuda y se refiere al petróleo . No puede argumentar que defie nd e a la de mo
cracia, porque Kuwait es un país autoritario, donde nad ie hace política sino los
jeques . Ni puede arguir que ha !liili~I! levantado un ejército para salvar l as
vidas de los rehenes no rteamericanos, porque la desmesura de la acción se lo i mpide . El país que e n 1983 a rrasó a Granada, y apenas e n dicie mb re de 1989 inva a Panamá
dió en una acción análoga, por rap ida y eficaz, a la ocupación de Kuwait , mala e n protesta
me nt e puede des garrarse las vestiduras contra álguien que hace lo mismo . La
Unión Soviética, por su parte, que aun con menor entusiasmo no ha dejad o de se cundar las acciones contra Irak, tie ne tamb ién e n su closet varios cadáveres :
la invasió n de Afganistán, sólo para mencionar la más reciente y cercana a esta
zona conflictiva de s u s acciones militares . Y el resto de los paí ses, es pecial mente los e uropeos, que ganaron carretadas de dinero vend iendo armamento y tecnc
logía a Hussein, se esncandalizan hoy se que utilicen esas armas como amenaza
contra la paz mundial .
Acaso porque esa contradición no escapa a las partes mis mas que la prac tican , la comunidad i nternacio nal se ha pasmado ante la audacia de Hussein . La
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reslució n del jueves 29 de noviembre~ adoptada por el Consejo de Seguridad de
la ONU es~ al fin de cue ntas~ ambigua. Es todo y es nada. Puede constituir
una virtual declaració n de guerra del mundo entero a Kli*~! Irak. Puede ser un
ultimatum~
un instrumento para forzar al agresor a negociar. Puede ser~ en fin~
una f~~mu la de compromiso que símplemente aplaza hasta enero el momento en que
verdaderamente haya que obrar~ en espera de que algo ocurrra~ que sólo podría
ser un milagro~ que haga innecesaria la guerra sin ~ue por ell o Hussein se sal ga con la suya .
México no ha dejado de estar afectado en varios modos por la situación.
Un efecto en apariencia beneficioso para nuestra economía ha sido el incremento
en los precios del petróleo~ que llegó a estar casi dos veces por encima del
precio calculado para propósitos fiscales por nuestros planeadores . Tal
alza
en el precio suscitó la tentación de aumentar la producc i ón~ con criterio de
mercader que quiere aprovechar la coyuntura aunque sus propósi t os de largo plazo s ufran quebranto. Pero en último término~ la alteración del mercado petrol e ro puede volverse en contra nuestra si provoca~ como está ya haciéndolo~ res tricciones y aun la recesión e n nuestro principal mercado para productos no pe troleros~
que es el propio Estados Unidos . Si la situación se prolonga~ y peor
aun si hay guerra CQn una secuela que nadie puede imaginar, pero que no será
tenue ni
breve~
el beneficio circunstanc ial del mayor precio por nuestro crudo
será anulado por el perjuicio más permane nte de nuestro comercio exteri or contra/ido~
especialmente en una hora en que todo lo jugamos a la inserción de Mé -
xico a la economía mundial .
De una participación militar directa por fortuna parece que estamos a
salvo . Una expresión presidencial indicó en algún momento lo contrario, pero
señales posteriores muestran que se reso l vió acogernos a la cordura. El secre dio una lección de geografía al hacer
tario de Ma rina Nix~ notar, apenas el viernes, que e l Golfo Pérsico queda lejos
de México .
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Materia
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Invasión de Kuwait
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Conflicto petrolero
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Tensiones internacionales
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Guerra del Golfo
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Relaciones diplomáticas
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Economía mundial
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Sanciones internacionales
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ONU
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Persona o institución mencionada
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Kuwait
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Irak
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Saddam Hussein
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Estados Unidos
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ONU
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Consejo de Seguridad de la ONU
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México
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Iker Larrauri
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Kuwait Investment Office
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OPEP