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Extensión
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2 fojas
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Resumen
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Aunque apenas se inician propiamente las campañas de los candidatos en las elecciones federales, ya se perfila el tono que revestirá esta temporada de la búsqueda del voto. Puede decirse que la época de las grandes concentraciones, de los mítines masivos, del acarreo y las aclamaciones multitudinarias, ha tocado a su fin..
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Tipo
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Borrador
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Clasificación
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UAMC.MAGC.01
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Sububicacion
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Sobre
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Texto completo
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pLl lica
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para la edición del 2 ~ de mayo de 1991
# El to no de las campañas
# ¿De dó nde procede el dinero?
miguel á ngel granados chapa
Aunque apenas se i nician propiame nte las campañas de los c andidatos ~
e n las
-" "(eleccio nes federales, ya se perfila el tono que revestirá esta te mp or ada de
la búsq ueda del voto. Puede decirse que la época •de las grandes concentrac io nes,
de los mí ti nes masivos, del acarreo y las
aclama cioh e ~mu ltit ud i~ arias,
hat o-
caso a su fin .
l_¿ (hi\1\ ~~~~¡;;._emes conducirán a un estilo diverso de propaganda electoral .
Bn \>rLner iuga:P/
el hartazgo de quie nes acudían forzados a las manifes tacione s
de apoyo a candidatos a quienes ni siquiera conocían. Los mítine s de cierre de
campaña del PRI, en las elecciones de 1988, fuero n engañosos, y se ha podido
saber por boca de fuchos de los afectados, que
el~ acarreo rue transformado en
voto s e n co ntra del partido guber name ntal. Si la gran conce nt ración en favor del
'
candidato Salinas, e n el Zócalo del Distrito Federal/ hubiera correspo ndido con
el verdadero temperamente político de quienes acudieron a la magna reunión, y
C..ó l' í
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de la població n ciudadana en ge neral, el resultado no ubiera sido tan desastro-¡
so como lo í'ue.
Por consiguie nte, se buscará ahora, por parte del PRI, un acercamiento
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más en corto con los ciudadanos. Claro que e n distritos de dimensiones considera
ble s esa opción es de práctica muy difícil, pero de todos modos se intentará
au nque su cobertura sea parcial, pues en poco más de doce semanas no siempre
se agotarán las posibilidades de e ncuentr o con grupos significativos.~ Asimi s-
>o~~
mo, puede ser que desaparezcan , o se redu zca n al mínim ~ las vi sit asraomicilia-
rias, donde a veces se susqitan encue ntros desagradables, o so n s usceptibles
PYOVDc..ó.t-fV¿S.
de fu ntromisiones
~~e¿ea~ .
Se acudirá tamb ién de modo prefere n~ a las emisione s de radio y te le- '
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visión, no mediante la public idad pagada, porque s us ~xE~i~ tar ifa s suelen que -
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plazéi. p úb lica/ ~
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4.
~
dar fuera del alcance de los partidos y sus candidatos (salvo que cuente n co n
mecenas gen erosos ), sino a través de~ las noticias y el telefó no abierto, las me sas redo ndas y las entrevistas.
En efecto, pri ncipalmente e n el Distrito Federal, pero no sólo allí,
los pr Jgramas radiofónicos (y e~ebtual ment e alguno de la TV) serán convertidos
e n verdaderas ágoras, do nde se realicen "mítines electrónicos" sin el riesgo
ni el costo de los que efectivamente reúne n a la gente~ e n las plazas púb licas.
De allí q ue se abulte ahora la prese ncia púb lica de quienes conducen ese género
de emisio nes, y se generen problemas ' Uevo s, que co ncierne n a la i gualdad de
oportunidades de los partidos y sus
candidato7~urar e n tales espacios.
No dejarán de utilizarse for mas tradicionales de propaganda, como las
pi nt as, mantas, carteles, todo lo c ual~ alcanza un costo enorme . Sólo tendrán acc eso a tales i nstrumentos de proselitismo, en ~o n secue n cia, los partidos
bi en dotado s de recursos económicos. Ese es el c a so del PR~, sobre todo. No es
sólo el partido que, por el volumen de sus votos, obtie ne un mayor fi na nciamiento público, sino que está e n situación de beneficiarse de su posició n de pa rti do hegemónico, e n el poder. No es por áni mo solidario símpleme nte que en torne
de los siste ca ndidatos priístas a gober nadores, y alrededor de no pocos de sus
candidatos a se nadores y dip utados, se for me n comités e mpresariales que aportan
y buscan medios materiales para las campañas. El tema se plantea en la más cruda lógica mercantil: se trata de una i nversión en pos de una ganancia . Otros
partidos tal vez cuenten con procedimientos análogos de recadudación de recursos, pero siempre serán a mateures comparados con la eficacia de los mecanismos
priístas.
Carece mos de legislación que mida, tase y limite la propaganda. Por lo
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.
e_ CcJYt.V Mrv1 Ce.5 /
tanto, las co ntribucio nes ~~ a las campañas pueden te ner el monto
y el or igen que sea. Recu rsos estatales pueden e n co nsec uencia ser usados y,
tambié n, otros que prove ngan de actividades pel~sas y nocivas como el narco.ón aguda y sostenida de las campañas puede ofrecer i n O
b
servacl
tráfico . Sólo la
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oporcionados o de orlgen
poc o claro ·
dicios de medios despr
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Persona o institución mencionada
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El tono de las campañas