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Extensión
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2 fojas
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Resumen
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Columna La Calle que aborda el libro 10 de junio ¡ganamos la calle! de Joel Ortega Juárez, que viene a ser un nuevo testimonio sobre la matanza del Jueves de Corpus, he aquí algunas líneas sobre el ataque policial y paramilitar a la manifestación : ´Apenas habíamos caminado unas cuantas calles cuando los granaderos nos detuvieron tratando de impedir que continuáramos. Con una mezcla de candor y arrojo negociamos con los comandantes, y luego de tirarles un rollo sobre nuestros derechos constitucionales, conseguimos que se abriera la valla policíaca. Nunca sospechamos que actuarían Los halcones con el salvajismo que produjo cientos de muertos y centenares de detenidos, heridos y algunos desaparecidos´..
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Tipo
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Artículo periodístico.
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Clasificación
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UAMC.MAGC.01
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Sububicacion
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Sobre
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Texto completo
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La calle
para el viernes 1Ode junio de 2011
Diario de un espectador
Diez de junio
Miguel ángel granados chapa
A 40 años de la matanza del Jueves de Corpus, que se cumplen hoy,
se publica un nuevo testimonio sobre aquel episodio de la historia
mexicana. Lo ha escrito Joel Otiega Juárez, un viejo militante comunista
que en 2000, junto con su entrañable amigo Jorge G. Castañeda fue
promotor del voto útil que reforzó las posibilidades de triunfo de Vicente
Fox.
He aquí lo que dice sobre el ataque policial y paramilitar a la
manifestación del 1O de junio de 1971 el entonces estudiante de economía
en la UNAM, en JO dejunio :!ganamos la calle!:
"Apenas habíamos caminado unas cuantas calles cuando los
granaderos nos detuvieron tratando de impedir que continuáramos. Con una
mezcla de candor y arrojo negociamos con los comandantes, y luego de
tirarles un rollo sobre nuestros derechos constitucionales, conseguimos que
se abriera la valla policíaca. Nunca sospechamos que actuarían Los
halcones con el salvajismo que produjo cientos de muertos y centenares de
detenidos, heridos y algunos desaparecidos.
Uno de los primeros ingenuos ante el grito de ¡Che, Che Guevara!
con el que llegaron Los halcones, fue Pedro López, profesor de la facultad
de economía, recientemente asesinado sobre su cama en su departamento
de Acapulco ... Pedro invito a Los halcones a integrarse a la manifestación.
Recibió como respuesta un golpe de kendo que le rompió algunos huesos.
Luego de ese ataque relámpago con kendos, que los manifestantes
consiguieron derrotar, comenzaron los disparos. La imagen tristemente
celebre del halcón en posición de tiro, disparando su metralleta lo dice
todo. Cada disparo me estrujaba dolorosamente: 'Un muerto, oro más, un
herido, otro más por allí ', me repetía mi propia voz, taladrando el cerebro y
sacudiendo mis emociones. No podía evitar una enorme responsabilidad
personal pues fui yo quien habló antes de salir en manifestación para
decirle a los compañeros: ' Vamos a salir. No podemos cederle la calle al
gobierno de Echeverría. La libertad de manifestación se defiende
ejerciéndola. Sabemos que hay un gran despliegue policíaco, pero no
vamos a caer en provocaciones. Haremos valer nuestros derechos.
Adelante, compañeros '
"Todo era el caos apocalíptico. Gritos, disparos, olor a pólvora y
gases lacrimógenos, mantas tiradas en el piso. Algunos valientes tiraban
piedras a Los halcones. Quizá hubo disparos del lado de los estudiantes; si
así fue, habrán sido pocos y de bajo calibre, defensivos. Nada ue hacer
frente al ataque comandado por el siniestro militar Manuel Díaz Escobar,
organizador de Los halcones ....
"El salvajismo con que actuaron fue dantesco ; llegaron a las
instalaciones del hospital Rubén Leñero, entonces denominado Cruz Verde
- ubicado a unas calles del sitio de la matanza- y sacaban a los heridos de
los quirófanos para ajusticiados frente a los médicos y enfermeras. Algunos
de éstos valientemente intentaban proteger a los heridos. Era el infierno.
"Junto con Jairo Calixto, viejo militante comunista en el magisterio;
Víctor Barbosa, mi gran Lobo y más que mi hermano, y Alejandro Crespo
(Crespi), compañero desde Ja Prepa dos, logramos entrar a la Nom1al.
Estaba desolada. Rápidamente comprendimos que era una trampa mortal.
Había que salir de ahí. Todavía no se cómo saltamos una barda de tres
metros y atravesamos la calzada México-Tacuba a la altura de la tienda La
verbena, en la esquina con Lago Tláhuac, en pleno barrio de santa Julia" ...
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Materia
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La Calle, diario de un espectador
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Persona o institución mencionada
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Joel Ortega Juárez
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Pedro López