-
Extensión
-
1 foja
-
Resumen
-
El Tribunal Federal Electoral dará a conocer hoy en su domicilio de la colonia Culhuacán CTM, la Memoria de ese órgano jurisdiccional correspondiente al proceso.
-
Clasificación
-
UAMC.MAGC.01
-
Sububicacion
-
Sobre
-
Texto completo
-
1
' .
Plaza pública
para la edición del 23 de novietnbre de 1.995
Michoacán: 3 ganadores
r
Miguel Angel Granados Chapa
Ffoy concluye el plazo para que los pmiidos presente,.,t
en Michoacán sus recursos de inconformidad ante
irregularidades ocurridas en el proceso electoral que
desen1bocó en la jornada del 12 de noviembre. Sólo
cuando el tribunal estatal electoral desahogue esos
procedimientos, y cuando la legislatura local declare
gobernador electo a quien lo sea, se habrá dicho la
última palabra en el proceso. Con los datos a la tnano,
sin en1bargo, asistimos a un fenómeno singular, en que
los tres principales partidos de la entidad pueden
proclmnarse triunfadores. Es decir, frente ~ la victoria1 el
PRI, el PRD y el PAN pueden ser considerados iguales,
si bien es cierto que hay unos 1nás iguales que otros.
El PRI obtuvo la gubernatura. Aunque la ganó con
una votación proporcionalmente muy disminuída
respecto de ·las anteriores, si las cifras .quedan como las
emitió el Instituto Electoral Michoacano (o se modifican
sin alterar el resultado declarado por ese organis1no) el
senador Víctor Manuel Tinoco Rubí será el sucesor del
gobernador interino Ausencia Chávez. Este lo es desde
hace tres años, cuando se sacó la lotería tras ser forzada
la licencia del gobernador Eduardo Villasefior, n1uerto
unos meses más tarde. Conforme a los nú1neros oficiales,
que sirvieron para que el dotningo pasado Tinoco Rubí
1
:.
recibiera la constancia de n1ayoría, el legislador nacido
en Zitácuaro obtuvo 430,080 votos. En términos
absolutos, el PRI ganó exactan1ente doce mil votos
respecto de los alcanzados en 1992, pero su porcentaje
cayó del 53 por ciento al 38.8 por ciento. Si se considera
que el también senador Cristobal Arias ganó para el PRD
358 mil, sería necesario que el tribunal anulara unos
setenta n1il votos priístas (y ninguno del PRD) para que
el resultado fuera distinto del que hoy se conoce. ·
Aunque el porcentaje alcanzado por Arias fue esta vez
n1enor que el de hace tres años (36 por ciento de
entonces contra 32.38 por ciento de ahora), en nútneros
·absolutos el líder pfredista michoacano convenció a casi
setenta mil votantes tnás que en 1992, pues su votación
creció de 289 mil a 358 n1il sufragios. Acción Nacional,
por su parte, quintuplicó su votación y casi multiplicó
por cuatro su porcentaje: avanzó de los 56, 293 votos (7
por ciento del total) que obtuvo Fernando Estrada
Sámano, a los 281,833 (25.48 por ciento) logrados por
Felipe Calderón.
En los comicios legislativos, el PRI ganó once
distritos, cuatro Acción Nacional y tres el PRD. Pero se
ha generado un problen1a respecto de las curules de
representación proporcional, a causa de diferencias de
interpretación sobre la base para calcular su reparto. En
la_ legislación tnichoacana rige ]a cláusula de
gobernabilidad. mecanistno para asegurar que un partido
que obtuvo más votos que otros, pero no la 1nayoría de
los asientos, participe en la distribución de las bancas de
representación · proporcional. Se requiere para ello
2
trasponer la barrera del 37 por ciento. Según la autoridad
electoral, el PRI consiguió ese resultado (y por lo tanto
le asignó cinco curules plurinominales ). Según la
oposición1 , el partido oficial alcanzó el 36.97 de la
votación, y carece por lo tanto de derecho a beneficiarse
de la cláusula tnencionada. No es sólo una cuestión
aritmética, que pueda resolverse con una calculadora. La
diferencia radica en que el Instituto Estatal Electoral
hizo su ~jercicio sobre la votación válida, y la oposición
considera la votación emitida, sin descontar los votos
nulos. El asunto será resuelto por el tribunal electoral, y
de su decisión dependerá el control de la legislatura. Hay
que decir, sin emba11rgo, que hace tres años al PRI le fue
mejor que ahora, y~que entonces obtuvo de arranque 17
de los 18 distritos de n1ayoría, y de un total de 30. El
PRD obtuvo en 1992 diez diputados, y ahora tendria
sólo siete, tres de mayoría y cuatro de representación
p~orcional. El PAN tendría el 1nisn1o total, con cuatro
de 1nayoría y tres plurinominales, lo que de todos modos
significa un gran avance, porque en 1992 la polarización
en favor de sus rivales le dejó sólo una curul.
En las elecciones municipales, los triunfadores
fueron los partidos opositores. El Partido de la
Revolución Democrática alcanzó más ayuntamientos que
ninguna otra agrupación, pero el PAN gobernará a más
.: habitantes que sus antagonistas. El cardenistno avanzó
de 42 n1unicipios a 53; pero el PAN catninó con botas de
siete leguas, y no sólo creció de 5 ayuntamientos a 14,
sino que ahora ~ina las poblaciones con mayor nútnero
de habitantes: Morelia, Uruapan, Zamora, Zitácuaro,
3
'
'
•
Quiróga, La Pied3;d, Ciudad Hidalgo y Sahuayo. El PRI,
ante esos resultados, quedó convertido en un partido
marginal, arrinconado en los municipios n1ás pequeños.
Esa complicación obligará a los partidos y al
gobierno michoacano a emprender nuevas rutas de
entendimiento, como lo detern1ina la voluntad
ciudadana. Digo, si ésta es claratnente respetada después
de las resoluciones del tribunal.
4
Jueves 23 de noviemore ile 1995, REFO~
PLAZA PúBLICA
MIGUEL ANGEL GRANADOS CHAPA
Michoacán: 3 ganadores
Si no se estorban y llegan a nuevos entendimientos derivados de la peculiar distribución del
poder en ese estado, los partidos michoacanos
pueden enriquecer la convivencia civil en esa
en ti dad, pues ninguno dominará a solas
·
la vida institucional.
Hov
ws
dos presenten en Michoacán sus recursos de
coNCLUYE EL PLAZO PARA QUE
PARTI-
inconformidad ante irregularidades ocurridas en el proceso ell~ctoral que desembocó en
la jornada del12 de noviembre. Sólo cuando
el tribunal estatal electoral desahogue esos
procedimientos, y cuando la legislatura local
declare gobernador electo a quien lo sea, se
habrá dicho la última palabra en el proceso.
Con los datos a la mano, sin embargo, asistimos a un fenómeno singular, en que los tres
principales partidos de la entidad pueden
proclamarse triunfadores, de algún modo y
en alguna parcela del poder. Es decir, frente
a la victoria, el PRI, el PRD y el PAN pueden
ser considerados iguales, si bien es cierto que
hay unos más iguales que otros.
El PRI obtuvo la gubernatura. Aunque la
ganó con una votación proporcionalmente
muy disminuída respecto de las anteriores, si
las cifras quedan como las emitió el Instituto
Electoral Michoacano (o se modifican sin alterar el resultado declarado por ese organismo) el senador Víctor Manuel Tinoco Rubí será el sucesor del gobernador interino Ausencio Chávez. Este lo es desde hace tres años,
cuando se sacó la lotería tras ser forzada la
licencia del gobernador Eduardo Villaseñor,
muerto unos meses más tarde. Conforme a
los números oficiales, que sirvieron para que
el domingo pasado Tinoco Rubí recibiera la
constancia de mayoría, el legislador nacido
en Zitácuaro obtuvo 430 mil80 votoS'. En términos absolutos, el PRI ganó exactamente
doce mil votos más que los alcanzados en
1992, pero su porcentaje cayó del 53 por
ciento al38.8 por ciento. Si se considera que
el también senador Cristóbal Arias ganó ahora para el PRD 358 mil votos; sería necesario
que el tribunal anulara unos setenta mil votos priístas (y ninguno del PRD) para que el
resultado fuera distinto del que hoy se conoce. Aunque el porcentaje alcanzado por Arias
fue esta vez menor que el de hace tres años
(36 por ciento de entonces contra 32.38 por
ciento de ahora), en números absolutos el líder perredista michoacano convenció a casi
setenta mil votantes más que en 1992, pues
su votación creció de 289 mil a 358 mil sufragios. Acción Nacional, por su parte, quintu-
plicó su votación y casi multiplicó por cuatro
su porcentaje: avanzó de los 56 mil293 votos
(7 por ciento del total) que obtuvo Fernando
Estrada Sámano, a los 281 mil833 (25.48 por
ciento) logrados por Felipe Calderón.
En los comicios legislativos, el PRI ganó once distritos, cuatro Acción Nacional y tres el
PRD. Pero se ha generado un problema respecto de las curules de representación proporcional, a causa de diferencias de interpretación sobre la base para calcular su reparto.
En la legislación michoacana rige la cláusula
1
de gobernabilidad, mecanismo para asegurar que un partido que obtuvo más votos que
otros, pero no la mayoría de los asientos, participe en la distribución de las bancas de representación proporcional, a fin de garantizar que la legislatura funcione. Se requiere
para ello trasponer la barrera del37 por ciento, y ganar más de nueve curules. Según la
autoridad electoral, el PRI consiguió ese resultado, 37.8 por ciento, y por lo tanto le asignó cinco curules plurinominales. Según la
1
oposición, el partido oficial alcanzó el36. 7 de
la votación, y carece por lo tanto de derecho
a beneficiarse de la cláusula mencionada. No
es sólo una cuestión aritmética, que pueda resolverse con una calculadora. La diferencia
radica en que el Instituto Estatal Electoral hizo su ejercicio sobre la votación válida, y la
oposición considera la votación emitida, sin
descontar los votos nulos. El asunto será resuelto por el tribunal electoral, y de su decisión dependerá el control de la legislatura.
Hay que decir, sin embargo, que hace tres
El senador Víctor Manuel Tinoco,
que el domingo recibió constancia de mayoría, alcanzó 38.8 por
ciento de los votos en la elección
de gobernador, mientras que en
1992 el candidato de su partido,
que luego pidió licencia, llegó a
53 por ciento de los sufragios.
años al PRI le fue mejor que ahora, ya que entonces obtuvo de arranque 17 de los 18 distritos de mayoría, y una banca plurinominal
más, dentro de un total de 30. El PRD obtuvo
en 1992 diez diputados, y ahora tendría sólo
siete, tres de mayoría y cuatro de representación proporcional. El PAN tendría el mismo
total, con cuatro de mayoría y tres plurinominales, lo que de todos modos significa un gran
avance, porque en 1992la polarización en favor de sus rivales le dejó sólo una curul.
En las elecciones municipales, los triunfadores fueron los partidos opositores. El Partido de la Revolución Democrática alcanzó más
ayuntamientos que ninguna otra agrupación,
pero el PAN gobernará a más habitantes que
sus antagonistas. El cardenismo avanzó de 42
municipios a 53; pero el PAN caminó con botas de siete leguas, y no sólo creció de 5 ayuntamientos a 14, sino que ahora domina las poblaciones con mayor número de habitantes:
Morelia, Uruapan, Zamora, Zitácuaro, Quiroga, La Piedad, Ciudad Hidalgo y Sahuayo. El
PRI, ante esos resultados, quedó convertido
en un partido marginal, arrinconado en los
municipios más pequeños.
Esa complicación obligará a los partidos
y al gobierno michoacano a emprender nuevas rutas de entendimiento, como lo determina la voluntad ciudadana. Digo, si ésta es
claramente respetada después de las resoluciones del tribunal. Por lo menos en Michoacán, ningún partido tendrá el control
político pleno, y si todos ellos comprenden
la situación y no se estorban, la pluralidad
de poderes enriquecerá la convivencia.
•••
1
CAJÓN DE SASTRE
E
l Tribunal Federal Electoral dará a conocer hoy en su domicilio de la colonia
Culhuacán CTM, la Memoria de ese órgano
jurisdiccional correspondiente al proceso
electoral federal del año pasado. Si dicha
publicación ha sido relevante de suyo, la edición que ahora se presenta adquiere mayor
importancüi porque al tribunal correspondieron nuevas y eminentes funciones, derivadas de que se pusiera fin al proceso de autocalificación de los comicios legislativos.
Participarán en la presentación tres miembros del Tribunal: un magistrado de la sala
de segunda instancia, procedente del poder
judicial federal, don Guillermo Ortiz Mayagoitia; un magistrado de la sala central, don
José Luis de la Peza; y uno de una sala regional, la de Durango, don Juan Angel Chávez Ramírez. El Tribunal convidó a que fueran asimismo comentaristas de la Memoria,
al secretario general del Instituto Federal
Electoral, Agustín Ricoy; y a dos consejeros
ciudadanos del propio IFE, José Woldenberg y el autor de esta columna.