-
Extensión
-
1 foja
-
Resumen
-
El signo social de Sinaloa parece ser la violencia.Esta no sólo es producto de la aguda crisis económica que afecta a los sectores más desprotegidos, sino también de la incapacidad del gobierno de! estado para resolver por la vía del diálogo y el entendimiento los problemas sociales que aquejan a nuestra entidad.
-
Clasificación
-
UAMC.MAGC.01
-
Sububicacion
-
Sobre
-
Texto completo
-
A LOS UNIVERSITARIOS DEL .PAI
A LA OPINIO!N PUBLICA NACIONAL
AL C. LIC. ,M ANUEL BARTLETT
SECRETARIO DE GOBERNACION:
El signo social de Sinaloa parece ser la violencia.
Esta no sólo es producto de la aguda crisis económica
que afecta a los sectores más desprotegidos, sino
también de la incapacidad del gobierno de! estado
para resolver por la vía del diálogo y el entendimiento
los problemas sociales que aquejan a nuestra entidad.
Resultado de esta situación de intolerancia y
cerrazón oficial, el día de ayer, 12 de enero de 1983,
dos trabajadores de la Universidad Autónoma de
Sinaloa: Rosario y Alejo Uzarraga, padre e hijo, fueron asesinados en el predio Tultita del municipio Salvador Alvarado, en momentos en que junto a un
grueso contingente de universitarios, daban solidaridad a una comunidad urbana en formación.
Los agresores -protegidos e instigadQ)sPoi las
policias municipal y judicial, así com¡o por las
mismas autoridades del municipio, uno tle ellos segundo regidor del mismo- fueron !os que dispararon
contra los compañeros colonos y universitarios, y los
que ultimaron a sangre fría a dos de nuestros compañeros.
Un indicio que viene a evidenciar la gravedad
de la situación de violencia institucionalizada y del
criminal acto que denunciamos, lo constituye la intención explicita de las autoridades judiciaies del
gobierno del estado de hacer culpables a quienes
fueron agredidos: los colonos y universitarios. Prueba
de que esto se persigue es que, de manera alevosa
y premeditada, fueron detenidos el profesor de la
preparatoria de Salvador Alvarado, César Bojórquez
y el colono José Luis Navarrete.
En estos momentos el predio donde Sé suscitaron
los acontecimientos está rodeado por las policías municipal y judicial: existe la seria amenaza de que sean
víctimas de una nueva agresión quienes allí se encuentran.
Los hechos criminales que hoy nos ocupan y
que denunciamos con toda energía, no son, lamentablemente, los únicos que se han cometido en el
último tiempo contra los universitarios y el pueblo de
Sinaloa: como consta tanto a 'la opinión pública estatal y nacional, más bien ocurre que ningún sector
social h\ escapado a la situación de violencia generalizada \ue, en una alta proporción, tiene su origen
en los mismos aparatos policiacos, según pruebas
fehacientes y reiteradas. La Universidad Autónoma
de Sinal.o a no puede callar tal estado de cosas, mucho menos cuando los universitarios son directas víctimas de tal proceder arbitrario y nada civilizado
como antes hemos denunciado:
-En el mes de agosto de 1982 fue asesinado el
profesor de la UAS, Alberto Barrionuevo, sin que hasta
la fecha el crimen se haya esclarecido, a pesar de
promesas .del procurador de Justicia;
-En noviembre del año pasado la estudiante de
la UAS, Norma Alicia Meza López, fue también asesinada sin que hasta la fecha hayan sido castigados
los responsables.
Estos son casos recientes de miembros de la UAS,
que han consternado a la opinión pública local. que
mencionamos para no referimos a muchos otros que
conoce la opinión pública nacional y que han recogido puntualmente los medios de comunicación. ·
La comunidad toda de la Universidad Autónoma
de Sinaloa tiene la convicción profunda de que, en
momentos en que el país y el estado son presa de
una crisis económica sin precedentes, es responsabilidad directa de !os órganos del Gobierno Federal
asumir una responsabilidad muy grande en la vigencia de un estado verdadero de derecho, en el imperativo de auténticas libertades públicas, que en primer lugar implica asegurar el respeto a los derechos
y a la vida ciudadanos, a las garantías que reclaman todos y cada uno de los grupos sociales. Nosotros, como e! país, creemos que así deben concretarse los postulados de una real renovación moral
de la sociedad. Porque se trata, en definitiva, de dar
voz y fuerza a la sociedad civil y desechar todo signo
autoritario.
Demandamos· de las más altas autoridades de
la Nación, así como de los universitarios y de la
opinión pública, exijan junto con nosotros el esclarecimiento de estos hechos, el deslinde de las responsabilidades y el insoslayable castigo a' los responsables. Estimamos que la lucha por garantizar el respeto a todos 'los derechos humanos, cobra vigencia en
Sinaloa y en el país entero, frente a lo cual desde
ahora y en primer lugar, los universitarios tenemos
una principal responsabilidad.
Atentamente
Culiacán Roscties, Sin., enero 13 de 1983
SURSUM
Lic. JORGE MEDntA VIEDAS,
Rector
VE ~RSUS
mQ. DAVID MORENO LIZARRAGA,
Secretario General
-
Materia
-
El signo social de Sinaloa parece ser la violencia
-
Persona o institución mencionada
-
Norma Alicia Meza López.
-
Rosario y Alejo Uzarraga