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Resumen
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La Secretaría de Economía elaboró un proyecto de Ley de Normas Industriales con el Objeto de que el Ejecutivo después de su aprobación, La Cámara Nacional de la Industria de Transformación al igual que otros organismos representativos de productores y comerciantes fue citada para que en un plazo de 24 horas expresara su opinión ante la Secretaría de Economía sobre el mencionado proyecto de Ley de Normas Industriales..
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Tipo
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Revista
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Clasificación
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UAMC.MAGC.01
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Sububicacion
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Sobre
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Texto completo
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1
1 -
¡Comisión Ejecutiva de la
Cámara Nacional de la Industria
de Transformac ión.
PRESIDENTE
JORNADAS
INDUSTRIALES
Sr. Jorge M. Heyser.
PRIMER-VICEPRESIDENTE
0(gano men>ual do la CAMARA NACIO-
Sr. lng. Agustín Fouque
NAL DE LA INDUSTRIA DE TRANS.
EDITORIALES
I.- PROYECTO DE LEY DE NORMAS
FORMACION.
SEGUNDO-VICEPRESIDENTE
Plaza de lo~ República 6 , 40. piso.
Sr. Antonio Arella.¡o
México, D . F.
PRIMER VOCAL
Sr. Armando Mothelet
Ret]istrad o como ~utículo de 2a . dctse en J..
Ad ministración Geneul d~ Couolos de -
SEGUNDO V OCAl:
México, con fecha 25 de Juni o de 1948 .
Sr. Antonio Guardiola
T~RCE R
SUMARIO
VOCAL
Sr. lng. Ernesto Macias Sauza
Editoriaies ------ --------· · ----------- 1
Ante la Devaluación ---------· ___________ 6
ASESORES
Sr. General Joaquín de la Peña
Sr. Ing. José Crowley
ASESOR JURIDICO
Mé~tic o
la
y 'u Petróleo --------- ... . . . .. 1-t
Política Comercial y la Indu strial i-
zac ió n -------- - --------··· ·· -··· ·· --·----· 20
P~rspectiva Menwal ------------- 25
Convención ln,ternacional _ ---- - --· .. .. . . .. ) !
Sr. Lic. Carlos Sán;hez M ejorada Jr.
ASESOR EXTRAORDINARIO
Año l. Tomo 1, Num . 3. Sopb••· do 1948.
.>r. José ·R. Colín
TESORERO
Sr. Francisco Salas Arroyo
SECRIIT ARIO GENERAL
Sr. Lic. Héctor Baron.a.
Director:
Lic . Jesús Reyes Heroles
La Secretaría de Economía elaboró un proyecto. de
Le y de Normas In dustriales
con el objeto de c¡ue ~¡ Eje cutivo desoues de su est u dio
1 o en v i a r a. a 1 Ce n g r es o de l a
L:n ó n pa ra su apr ooactc n. _a
Cámara ~ac iona ! de la lndus tri• de Transf orm aci ó n al
i gu al
que
otros
or~a ni smos
repre se ntativ os d~ productores y comerciantes fué citada
~ara que e n un Riazo de 24
horas expresara su op in1Ón
ante la Secretaría de Economia sobre el mencionado ·p royecto de Lev de Normas Industriales.
.
Dentro del ~la~o perentorio de que se dispuso, la
Cámara Naciona l de la Industria de transformación hizo
notar que stempre se había
ma n i fe s-t a do p a r t i d a r i a d e 1a
normalización de los productos industriales y que consideraba que el impulso de
esa n ormalización gar antiLaba intereses de los consumi dores internos y externos, de
los exporta do res y de los
---- "'
mismos productores.
En cua nt o el p r ocedimiento comprendido en el Proyecto de Ley a que nos r efe rimos para dictar las n o rmas ,
mani festamos nuestro acuerdo
e n virtud de que este proce ~ i~iento practicamen t e
habia
estado vigente y la exper i en c i a demos traba s u eficacia al
r especto .
En i gual sentido expresó
este organismo su opinión so-
bre el funcionamiento de los
Comités de Normas, sus atribuciones, su integración y
las materias que comprenden.
En cambio nuestra In s titución objetó fundamenta l mente el artículo 21 del citado Proyecto. El precepto
textualmente establece: "La
Secretaría de Economía, prr v¡a
upinió n,
en
su
caso,
de
la dependencia o dependen cias oficiales in te r esadas
podrá declarar, cuando lo estime
co nv eQie nt e y
opnrtunu.
la obligatoriedad de las n~r
mas of iciales ".
Las
r~7.ones
en
aue
la
JOHNADAS
,¡
Cámara ~aci o n al de la Indu stria de Tr a n sformació n se
fund~ para objetar este ar tí culo, son las sig uientes:
l) Las norm_s indu str ial es
e n t odos los países del
mundo
son
pr i vadas
y
únicamer.t e
e n S - entre
ellos ~¿xico son ofi ciales.
Sa lvo
estos S
países en el
resto l as
normas so n dictadas por
entidades de tipo
privad o .
2) ~ormas ob li gator ias so existen
en la
l amente
Un ion de Rep~bl1cas So viétic as
Socia li stas y
este paí.s
en
como
se
comprenderá,
existe
to-
do un ~n~ranaje de
ín dole econc~ 1 ca soc ial y
po líti ca
para que pue dan dictarse normas industriales dP tipo obl iga t orio .
3) El Articulo 22 del mis mo
Pr~yecto
de Ley de
·a rmas In dus triales es tablece oue los
fabricantes
de
artículos y
productos
cuyas normas
hayan
sido
declaradas
ob lig ato ria~ por la Se cretaría de Econ o mía
11
no
podrán poner en venta o
circulación
tales
artículos s 1 no llenan la s
especificaciones que las
propias n ormas estab l ez ca n " , y más adelante se . ñala que la Sec r e tarí a
de Economía e n cada ca so e n q u e declare obli l'ato ri a una n o r ma, fijará l os plazos dent r o de
los cua l es l os fabrican-
JORNADAS
l:':DL' S TRIALE S
tes deben acatar! a. Este
a rtícul o concordado
debidamente c o n el artículo 21 del · propio pro yec to revela de manera clara
la s f acu l tades
e xtr ema~
y amplias de que se dota
a l a Secretaría
de Eco nomía en el proceso eco n Ómico
nacional, y
no
oculta lo peligroso que
cualquier pequeña
des viación en la recta apli cación de la ley
o r il'inaría.
Prácticamente de aproLarse el pro yec t o dP Ley de \or~as
tal
como se encue ntr a re-
dactado, la Secretacía rle
Economía gozar ía de facultades pa ra intervenir e n el
proces o de producc i ó n y dis tr i buc i ón del país, p u es 1n-.
di r ectame nt e fijaría costo s,
regularía p r od uc c i ones y po dría en determinadas situa cio n es hasta elimina r productores al señalar especif i ca ciones que por ciertas cir cunstancias - el abastecimiento irre gular de las materias
primas qu e ellas consumen por
ejemplo- no podrían reunir e n
a l g~ n ma nuf act urer o .
Los ot ros or ga ni smos r e p resent a tiv os de industri a les
y comercial es asistentes a la
c itada r e unión ~l a Confederació n de Cámaras Industri a les
y la Confederación de Cámaras
de Comercio- obje tar on tamb i é n el contenido de 1 a r t ícúlo 21, e n su fondo mismo.
Como algu n os r ep r ese n t a nte s de l a Secretaría de
·Economía man ife s tar on ,·e r bal mente q u e la facult ad de die·
tar normas de tipo obligatorio se fijaba en el proyecto
de · Ley para hacer uso en casos extremos, en que la naturaleza de los artículos en
cuest1on, la existencia de
un manifiesto interés p~bli
co, aconsejara la necesidad
de establecer especificaci o nes obli g atorias para la elaboración de dichos productos,
la C'mara Naci ona l de la Industria de Tran sfo rmación ex·presó que en este caso ella
proponía que la redacción del
artículo 2 1 fuera modifi cad a
de manera sustancial, expresándose en ella:
l) Los casos verdaderamente
ex~ep c ionale s
en q u e la
Secre~aría pod ría dictar
norma s obligatorias.
2) La consulta previa en estos
casos
con organismo s
repre se nt a tivo~ de
prod~ctores y consumidores.
La Cámara Nacional de la
Industria de Transformación
piensa que en esta forma, podría la Secretaría. de Economía gozar de las facultades
que para casos excepcionales
ella requería, sin . que ello
INDUSTRIALES
implique una lesión para los
intereses de los productores,
o una grave amenaza por desviaciones en su uso, para el
desarrollo . industrial del
país . .
El Presidente de la Cámara Nacional de la Industria
de Transformación, señor Jorge M. Heys e r c ategóricamente
expresó que era partidario de
la normalización al m'ximo de
los productos pero que el
Proyect o de Ley de Normas tal
como se encontraba redactado
a trav és de sus artículos 21
y 22, vendría a op e rar como
un freno a la indu st rializac ión del país y que en esta
forma él lo objetaba en s u
fondo.
Hasta el mome nto carecemos de informes en e l sentido de sí l o s puntos de vis:
ta expresados por nosotros
han sido tomados en consid e ración por la Se cretaría de
Economía y se han realizado
conse c uentemente, en el proye c t o de Le y de Normas Industrial e s las reformas por nosotr os sugeridas.
. II.- PROYECTO DE LEY DE CAMARAS DE COMERCIO Y DE
INDUSTRIA.
Con rgual premura - tuvo
la Cámara Nacional de la Industria de Transformación que
presentar sus puntos de vista
sobre el proyecto de Ley de
Cámaras de Comercio e Industria elaborado también por
la Secretaría de Economía.
A este respecto la Cá~ara Nacional de la Industria.
de Transformación hizo notar
que · a m's d e adolecex: el citado proyecto de numerosos
defectos de técnica jurídica
y de contener una serie de
lagunas de orden práctico, él
debe ser objetado en cuanto
al · sistema mis~o en que se
sustenta. Es decir , consideramos que el criterio esen-
JORN AlJAS
4
JORNADAS
cial adoptado por el proyecto
resulta inadecuado y contrario a los intereses de los
industrial es.
En efecto, el proyecto
de Ley de Cámaras de Comercio
e Industria en su articulo 22
declara que la facultad de
ins c ribirse en las Cámaras de
Comerc4o o de Indus~ria es
potestativa, viniendo en esta
f orma a romper con el criterio sustentado por la Ley actualmente en vigor.
~! : declarar voluntaria
l a inscripción de los industriales o comercia ntes en su~
cámaras,
viene a signi fic ar
prác tic amen te la liquidación
de e stos organismos o su debilitamiento en g rado extrPmo.
Significa esto, que la ·
Secre t a ría de Economía a través de su proye~to ha pensado
en la disgregación de lo s orga nismo s representativos de
industriales y comerciantes,
fundándose en un a interpretación estrecha, exclusivamente for mal y ant icuad a de
la idea de libertad de asocia ción. ~n efecto, la doc- trina ju_rídica • co nt em.p.orá ne a
exp lica como en la compleja
vida moderna existe la necesid ad de organismos - que veng~n a ser entidades ·intermed i a s e n t r e e 1- Es t a do y l o s
pa rti cu 1 a res, y que en esta
form a . canalicen voluntades,
orienten opiniones y coadyuven con el Estado y los particulares, en la realización
de programas económicos o sociales.
Ríca es la doctrina JU-
INCUSTRIALE.S
5
INDUS1 RIALES
prescribe la inscripción potestativa de industriale s y
comerciantes ~n sus cáma ras,
contiene una serie de precep·
tos que dan faculta des amplias de intervención y control a la ci tada dependencia
sobre estos o r ga nis mos . Esto es, siendo voluntaria la
inscripción en la s Cámaras
puede decirse que éstas sólo
reciben del Est ado la facultad de usar la denominación
de Cá maras y que a cambio de
esa facultad tien en q ue to l e -
ríd1ca contemporánea a este
respecto y ella parte fundamentalment e de considerar los
datos que en La presente realidad imperan, mismos qu e
ameritan la existencia de estos organismos intermedios
entre el Estado y los particulares, a través de s u constitución sobre bases peculiares en cu a nto a las relaciones entre ellos y sus asociados.
Las Cámaras de Industria
y Comercio entre otras funciones tienen la de ser organos de consulta del Estado
en materia económica. Ahora
bien, para cumplir cabalmente
con esta función co nsultiv a
ellas requieren un equipo
técnico que pueda hacer estudios sobre costos industriales, mercados, proc-edimientos de fabricación, aba s tecimiento de materias primas, loca]i zación de industrias, y en general una serie de problemas conexos con
el desarrollo industrial del
pa i s.
Disgregar ]os organismos industriales o debilitarlos declarando potestativa la
inscripción en ellos, impide
~ue pueda sostenerse un equipo ' técnico adecuado, y por
lo tanto se frustra el propósito perseguido por el Estado de que estas entidades
sean órganos de consulta para
rar una
intervenci ó n y con -
trol estatal, que practica mente les im ~ i de un a vida libre. Resalta pues, lo parad ó JlCO del proyecto de Ley de
Cáma ra s oor la falta de un
criterio .unita rio en su ela-
boración.
A la luz de esta sit uación, re su lt a claro q u ~ de
aprobarse este proyecto numerosos industriale s y comerciantes preferir á n co nstituir asociaciones de tipo
privado, dado que en éstas
tendrían más libertad de acción y no serían fiscalizadas sus a ctividades por la
Sec retaría de Economía.
La experiencia mexicana
al respecto demuestra que en
un régimen de interpretación
estrecha del concepto de libertad de asociación lo único
que sucede ' es que se forman
asociaciones que rebasan el
mero cumplimiento de los fines que deben perseguir organizaciones industriales o
él.
Lo paradójico resulta,
que el mismo proyecto que a
nombre de una interpretación
formal y estrecha del concep.to de libertad de asociación.
7!
1
comerciales.
Al debil ·itarse las Cámmaras mediante la inscrip·
ción voluntaria en ellas, se
impediría que estos organismos cumplan su funciÓn cons ultiv a con respecto al Estado y encaucen debidamente
las peticiones de los industriales.
De acuerdo co n estos
puntos de vista la Cámara
Nacional de la Industria de
Transforma c ión objetó del
Proyecto de Ley de Cámaras
elaborado por la Secretaría
de Economía el artíc ul o 22
que previene la inscripción
potestativa e n estos organis -
mos, l os ar<.ículos - que dan
facultades disc re c ionales a
la Secretaría de Eco nomí a para constituir
cámaras de co-
merclo e industria y los a rtículos que permiten a esta
deoendencia intervenir y contr~lar el funcionamiento de
las cámaras. Igualmente hizo
observaciones nuestra Institu ción de índole practica
tendí en tes a s u plir la g unas
evidentes de l a Le y .
Hasta el momento ignoramos s1 nuestros puntos de
vista han s ido tomados eo
cons id eración por la Secretaría de Economía, pero como
se comnrenderá no abando naremos su· defensa y no cejaremos
en nuestro empeño de reforma.
pues c reemos que nuestr a postura expresa los intere se s
de nue st ro s asociados.
JORNADAS
ANTE LA DEVALUACION
LA C.A..MARA NACIONAL DE LA INDUSTRIA DE TRANSFOR
MACION FIEL A SU NORMA DE COLABORAR CON EL
SENOR PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, EXPRESA:
Tenemos la firme conv¡cción de que ante el ajuste
~onetario realizado por nuestro Gobierno, se impone que
todos los elementos que en
alguna forma concurrimos a la
vida económica del país, verifiquemos una re fl ·exió n serena y- obj "'t.iva, tanto sobre
la s causas que condujeron di' e ctamente a la necesidad de
mo dificar sustancialment e la
política mone-taria a el país,
com o sobre las consecuencias
de la medida adoptada. La
primera reflexión d-ebe emprenderse con el ánimo de es' L U i a r · Un a e X pe r i en C i a ,
CUy a
cuidadosa observación puede
facilitar eL encuentro de -métodos adecuados, para enfrentar nos frontalmente con las
causas mismas de la devaluació n. En cuanto a la segunda
invest.igaci~n, enjuiciar la
~edida adoptada,
debe ser
realizada con ~lena serenid a d, dado que bajo ningún
a
,,
1·
lo ncepto
consideramos que en
~ u enj uiciamient o o la pro~osición de una medida ese n-
cialmente distinta, exista un
problema de ideología ni el
diferir al respecto implique
polémica que permita clasificación pol.ítica alguna.
Creemos que en esta materia no hay ortodoxia ni heterodoxia y partimos de la base
de que todos los mexicanos
coincidimos en un solo propósito: colaborar lealmente
con el señor Presidente de la
República a fin de que el
país pueda vencer la difícil
situación actual.
Desde e~ta amplia perspect~va podemos presenJar
nuestros puntos de vista con
la seguridad de que ellos no
pretenden ser más que una
aportación modesta a la - resolución de tan graves problemas.
1.- Al finalizar lapasada contienda nuestro país
poseía reservas apr~ciables
de dólares que no solamente
parecían garantizar su estabilidad económica inmediata,
s1no que además en algún momento nos hicieron abrigar la
&reencia de que México tenía
la oportunidad de acelerar en
la ~ost-guerra su desenvolvimiento económico. La acumulación de estas reservas obedeció:
1) Al incremento de las expo~taciones
durante el
lapso de la guerra;
2) A la imposibilidad de satisfacer durante ese mlSmo período num erosas d emanda s de bienes de producción y bienes de consumo de origen extra nj ero, en virtud de las propias condiciones económi -
cas de la emergencia;
refugio e n el país de
capitales extranjeros.
A la luz de esta situación, era perfectamente previsible que una vez que finalizara la contienda ármada,
Méxice se e nfrentaría en esta
materia a un proceso doble:
a) Por una parte una di smi nución
sensible
en el
ritmo de sus exportacio nes,
tanto por desaparecer la demanda de ciertos
materiales de índole estratégica o bélica, como
por la segura vuelta al
comercio internacional de
ciertas áreas productora s
competí dor~s,
que
como
consecuencia
directa
o
indirecta de la contienda
habían permanecido cortadas de él.
Como ejemplo
de la primera
situación
podemos presentar el- decrecimiento en -la demanda
de ciertos min erales y de
la segunda la crisis qu e
recientemente afectó a la
3) Al
7
INDUSTRIALES
industria mexicana exportadora de productos transformados de henequén.
b) Por otra parte, era obvio
que de no implantarse una
serie de medidas económicas
a de e u a das , se re a 1 izarían en
c uanto la
re-
conversión
industrial
norteamericana
lo permitiera,
una serie de
importaciones diferidas,algunas de
las cuales
no
nada más
eran estric~
mente
necesarias,
sin t9
que vendrían directamente
a contribuir al
enriquecimiento na cional y ot ra s
que
por el
contrario, a
má s
de ser
meramente su-
perfluas, vendrían · com petir con
industrias nativas,
elimiQándolas en
algunos
casos, y
por lo
consiguiente debilitando
doblemente nue stra econo mía,
puesto que ~1 mismo
tiempo que originaban fugas innecesarias de nuestras reservas,
cerrarían
fuentes de empleo.
Las importaciones necesarias de México que se precipitarían una vez terminada
la contienda era lógico debe- rían estar co n stituidas, por
bienes de producción que estuvieran encamina do s a suplir
des gaste; sufridos o a ayudar
al desarrollo progresivo de
nuestr a industria, equipo y
materiales indispensables para los planes nacionale3 de
obras públicas, subsistencias
necesarias para cubrir hahituales déficits alimenticios
y materias primas pa~á indus-
¡1
1,
1
8
JORNADAS
trias d~ transformaci6n na- ~
cionales, Junto a estas imp o rta c iones es t rictamente
i n dis p e n s abl es , era previsib le qu e de n o fr en a r s e suficie nt eme n te ,
se
ver i fi c aría
una a va lancha d e imp o rtacion es s u pe r f 1 u as , t a nt o por 1 a
espe cífi c a d is tri b uci 6 n de la
riq u eza n ac i o n a l, co mo por
l os nú c l eos de e sp e culadore s ,
que co mo es n a tural, se hab í ~ n en ge n d rad o en México al
a mpar o ~el au g e exportador.
A e st e cuadr o h ab ría que
ag regar la n o i mp?sib l e fuga
de c a p it a l es a ún c u a nd o no
ri g ur os a mente
i n e v it ab le y
la e mig r ac i 6 n d e div id e ndos
de
i nv e r s i o n es
i n t ern ac i o n a -
les rete n idos e n el p aí s c ome res ul tado de l as con diC1 o n es a n o rmal es qu e en el
mund o pr ivaban y qu e er a n a tur a l una v ez que di c h a s cond i c i o n es desa p a r ec i e ran emig r in ía n .
II.- En ate n c i 6 n a es ta s
p e r s p e e t í v a s r e s u 1 t a b a ~e vi de n te q u e el Estado Mex i ca no
con el Frop6sito de e vitar
descompensacio ne s
eco n ómi ca~
que c ul minara n co n un d es a-jus t e monet ar io o un a interye n ci6 n en el s i s tema ca m-
:1
11
,1
:1
:¡.
r
:¡¡
1'
1 ·-
bia ri o , d eb i ó h abe r . ad~ pta do
me di das co n cre t as te n d i e ntes
a:
1) Ca n a l i z a r rig ur os amente
nu es t ras
i mp o rta c iones
d e ma ne ra que s e ev¡t a r a n l as s u per flu as;
2 ) Fome nt a r
a l má xim o l a
p r od u cción n ac i o n a l ta nto ag r íco l a c o mo industr i a l.
3) Co n so lid ar me d ia nt e u n a
JORNADAS
INDUSTRIALES
ágil política de comer~
c1o exterior mercados
para nuestras producciones y a través de
tratados bilater•les equilibrados y sanos
abrir
nuevos mercados aún so-
bre la báse de trueque.
El inventario que de la
acci6n estatal e n esta materia se puede ha e e r es e 1 s 1guiente:
1:) La canalizaci6n de
nuestras importaciones de manera que se impidieran las
estrictamente superfluas, se
inten~6 ejercerla mediante el
decreto de julio de 1947 que
prohibe ciertas import&ciones. Desgraciadamefite tal medida pecó de . ~ardía, no fu é
suficientemente amplia, se
violó ininterrumpidamente y
además no estuvo dirigida· a
apr6vechar el carácter anormal que revestí.a, para conciliar la defensa de nuestra
balanza de pagos con una prudente protecci6n a industrias
nativas que coadyuvaría al
desarrollo industrial del
pa í s. Con igual objetivo se
dictó el nuevo arancel · pero
éste aftoleció de graves defectos técnicos -alguno s de
ellos aún no corregidos- que
hicieron que en muchos casos
se elevara 1~ tarifa correspondiente a partidas que ampaaaban materias primas de
importación imprescindible y
que en otros casos por fa'l ta
de una adecuada reclasificación aranc e laria más especializada se dejara a numerosas industrias nacionale s indefensas frente a la compe- .
tencia e xterior.
2 .) En cuanto a l _ ~am e nto de ~uestra produ. cc 1on hay
ue de s ta c ar qu e es t e , ~m ,
qrendid o vi gorosam e nt e so~o
puede r e s u lt a r d e l a r ea ll~a c i 6 n de u n pr oceso n e cesa ri ame nt e l e nt o, p e r o q u ~ ade ,
e n mate ri a in dustr 1 a l l a
m as,
. ,
f' ·
falta de un a ac c 1 o n s u 1C 1 e n t eme nt e prot ec t or a del Esta¿o se
tradu jo e n un a r ed u cclo n de
p r o d u e e i on es • ,q u e po r 1 a fa 1 t a de un a po ll t 1 Ca de come rc i o e x te r io r ág il Y ~qu lll
b r ada , se e n ~on t r a ba s •n me rcados e r. mu c h os re n g l ones .
L a no r e v isión o denuncla en
ú lt imo ext r ereo del Tratado
Comercial M~x i co - A m ~rlcano,
fué tambi~n f actor ese n c l al
e n qu e la endeb l e estructura
in dustr i a l de l pa í s padec 1 e r a
q u eb r a nt am i e nt os y desplazami e nt os pe rju d1c i ale~ p a r a l a
eco n om ía n ac i on al. F• nal menle
e n es t a misma m at~ ri a , l a
equ í voc a d i s tribu ci6n d el vo l ume n t otal de l c r édito exis te n te obsta cul iz6 Y 5 1 gue
o bst ac ul izando el increme n to
de l a p r od u cc i 6n n ac1o n al .
3 . ) En l o qu e toca a po l í t ic a de co w. e r cio ex t e rl or
h o s e p eca d e _s ev .e rid ad ~ al
d eci r q ue é st a p r áct 1 came nt e
n o e x is ti 6 , de modo que su
d esa rr o llo se co nfi 6 a la n a tur a l ~ con c urrencia de expor-~
t adores e import a _d o re s • s 1 n
considerar qu e en un mund o
económicamente
an o rmal
9
INDUSTRIALES
c o mo
lo ·es ei presente, _ tal abandono s 6 lo podía orl g 1nar p e rj uici os a nuestro p aí s .
Ill.- ~ sta simpl e d es cripci6n perm i t e f á c i lmente
concl ui r que la descom ~ e ns a
ci6n de nuest~a ec o nom1a tenía que cul mi n ar ne cesa ri a mente en una r ad i ca l mod 1 f 1caci6n de l a po lít ica mo n etari a n a c i o n a 1 y l ~ o qu e a ú n
e s má s lamentab l e, q u e ta l
s ituaci ó n se prese n ta r ía. s i n
que nu es tr o país, hu b1ese
di s mi nu id¿ sus r eser v as p or
i mp o r t~cio n es ~til es a s u de s arr ollo eco n om l co p r ogres iv o. Hay paíse s q u e. ha n ll e ga d o a un a situacio n Slm ll a r
a la n u estra ' por habe r r ea l i zado impo r taciones co n ve ni entes
a un
ritmo excesivo,
pero e l caso de M~xico es
di s tinto : 11 e gamos a la _modificación de nuestra pollt 1ca monetaria por la _real1za c i 6n de n umer o sas I mpo r ta c i ones
estrictame n te
supe r-
flu as , q u e lejos de ace l e rar
nuest r o d ese n vo lv• m•e n to eco n ómico , l o ha n f r e na do e n
vi r t ud de qu e mu chas de el l as
h an venido a d e sp l aza r 1nd u s tr ias n ac i on a l es . .
.
IV .- Ya ante la 1 n e vl t a b il idad de mod i f i ca r su~ta n
c i a l men te nu estra _pol l t 1 ca
mo n eta ri a , cabe sena l ar l a s
~ reper c u siones que la mis.ma
t ie ne sob r e nu estra econom i a.
l) L a deva lu aci6 n es un a
med i d a por s u p rop i a n atu r aleza d e ca r áct er ge n e ral , de
mod o qu e s u s re ~e r c u s • o n es
son g ene r ales y af ec t a 1 gu a lment e a to d os l o s sectore s
de l a p o bl aci6 n . Ello s1 gn•fic a qu e fr e nt e a un a me d lda
dev a lu ato ri a h ay q u e re"l lzar
un reac o mo d o de toda l a eco nomía d e l país q u e l a - ~ ufr e
·Y no S e ocultan la s d 1f1cul-
"10
JORNADAS
tades que para tal reacomodo
existen en un país con la estratificación de México.
-2) El ajuste devaluatorio de La cotización de la
unidad monetaria con relación
al tipo de cambio, forzosamente produce una disminución en el poder de compra y
de pago interno de la moneda
devaluada. Tal reducción en
e 1 pode r a d q u i si t_i v o in t e r n o
de la moneda en el ca so de la
economÍa mexicana ló g icamente
se agudiza s1 co n sideramos
_que:
a) Tenemos un déficit alimenticio
que
cubrimos
necesariam e nte
portaciones;
con
Im-
b) ~luchas de la s industrias
nacionales
s on abastecidas con materias primas de importación;
e) En estas condiciones la
Ley del arrastre de precios
funcion a
co n
una
cerelidad increíble.
3) En un país - objeto de
inversiones internacionales,
el
pago de los inter eses_de
1nvers1ones
extran .Jeras
In-
directas se hace más gravoso
en función de la moneda lnterna devaluada.
4) Se dice que la devaluación fomenta exportacion~s, y estorba importaciones
pero tal argumento de-sde el
punto de vista general se rebate en cuanto es ló g ico suponer, que inmediatamente
después del acto devaluatorio
se originan aumentos
d~
cos-
tos, que amortiguan indudablemente la reducción del tipo monetario para los efectos
JORNADAS
INDUSTRIALES
de las. exportaciones. Es de.
c1r, las condiciones de producción tienden a reajustarse
en un período más o menos
breve, haciendo nugatorio el
probable beneficio a las exportaciones resultante de la
devaluación. En lo referente
a México hay además que se~a
lar, que los porcentajes mayo res de - sus e x por t a e i o n es
están representados por productos naturales de oferta en
lo general inelástica y en
que una reducción de precios
no aumenta su demanda. De modo pues, que en términos ge nerales 1a devaluación no favorece o con mucho
optimismo
favorece restringidamente
nuestras exportaciones.
S) En el caso de México
por la especial distribución
de la riqueza que en el país
existe, la devaluación difícil~ente reduce en forma considerable las importaciones
de artículos superfluos, por
el encarecimiento de ellos, o
sólo las redu ce en una proporción, poco apreciable.
6) La experiencia monetaria internacional demuestra
que una v-ez que se realiza
un acto devaluatorio, la estabilización monetaria en
me~cado libre de divisas re~ul ta por algún tiempo casi
imposible v los ajustes hay
que verificarlos con cierta
periodi ciclad, a menos que se
presente un gran increm e nto
de producción y exportaciones
y un gran aumento en inversiones internacionales.
7) En un sistema bancario e o mo el nuestro e 1 me r-
cado libre de divisas, con
• tas • fomenta a
escasez d. e . es
-g r a d 0 s m a x 1 m o S la especula-
·d
Es de estas consl eracienes y otras más que no
mencionamos por no exten~er
demasiado esta declara:lon,
extraemos la oplnlon de
que n 0 era· la- devaluación la
que
medida más acertada ante el
ci ón.
presente panoram a mexicano.
V.- Creemos que por_~!
contrario,
la
intervencl~n
del sistema camhiario reallzada de acuerdo co n nuestras
realidades y debidamente ade cuada a nuestr o medl.o ofrece
las siguientes ventaJas:
l:- Al establecerse un
riguroso sist ema de prioridades en la s adqu1siciones de
~ivi sas de acuerdo con la
u~ilida d de los fines a nu e
ellas se van a d~dicar, s e
destie~ran
i mpo r tacio n es
~u·
pe r fluas y los recursos Cl spon ibles se encauzan hacia
importaciones n . eces~r l as . En
el caso de Mixlco estas serían esencialmente:
cubr1 r
a) Alimentos
para
nuestro déficit;
.
b) Equipos para
ob ra s publicas i~dispensables;
e) Materias primas imprescindibles pa ra industriaS
na e i o n a 1 e s ;d) Instrum-entos agrícolas,
y
abonos
in s ecticidas
nec esa ri os, no produ c idos en el pals.
2.- CCJnsecuentciT'ente no
se originan repercusiones ~e
cerales en la econDmía del
país ni se da lu~ar a bruscos
rea comodos .
ll
INDUSTRIALES
3.- Hay más posibilidades de defender internamente
el poder adquisitivo de la
moneda.
- 4. _ La intervención de
cambios se p uede emplear como
un
instrumento para orientar
la
polít ica comercial
fa,• orecien~o
país,
del
o restrin-
giendo irr.portac1ones, según
la co nv enie ncla que al -~es
pecto
la
eYista,
mon~da
en
atenc1on
portaciones se realicen .
5. _ El
r1r
a
co n que tales imEstado al
.
adqu1-
las divisas en menor can-
tidad de mo neda n acional_q ue
la que le fi j a a su adqulSIc l Ór: por pa r te de los import oido res, puede formar u na re•
serva de ca mbios, que . le permlt d subsidia r im~ortac~o~es
- 1as a 1 i me n t .1 e 1 a s
por ejemplo - o financlar a
3 r od tJctores ag rícolas nat¡v ?s
n e e r s a r i as
~ v ¡t a ndo encarecimientos
..:;acr i
~icar
Sln
precios remUnera-
tivos pa ra éstos.
VI.- ~n contra de la implantación de una intervención cambiarla se esgr lmen
los siguientes argumentos,
que por revestir seriedad
ameritan el ocuparse de
ellos:
l) Trae aparejado el
mer cado negro de divisas. A
este - respecto conviene _ señalar:
a) Existe la posibilidad de
"oficializar" dicho "mercado n eg ro",
hacien~o
que
las divisas p r oven ient es
de exportacio nes eventuales o en rigor
excepclonales, n 0 vayan a la masa
común de divisas contra -
2
JORNADAS
ladas,sino que ellas concurra-n a un lícito mercado libre;
b) La devaluacrón en un país
con nuestro sistema bancario no hace más que tolerar
un vast o
"mercado
ne g ro" legaliz ado ,en vir tud de las especulaciones
ane i as al mercado libre
de divisas en
un estndo
de escasez de previsible
agra-vamiento;
2) Rompe en forma gr ave
el equilibrio económico internacional y da lugar consig uiente me nte a r epres alia s de
los pa í ses af ectados. A este
a r gumento se puede contestar:
a) Diciendo que d icho equ ili b rio se haya roto si si
toma· en co n sideraci6 n q u e
la mayo rí a d ~ l os países
tienen
actualm e nt e establecido el · control
de
ca mb io s ;
b)
Es du-doso q ue una devalu ac ión oportuna, n o rompa
di e h o
e q u i 1i b r i o
y
origi ne me didas de r eto rsión o repre salia de
l os
países a cuyas
expe nsas
opere positiva me nte.
3) Ahuyenta inversiones
1nternacional es . A este respecto cabe manifestar que:
a) Se puede convenir con el
inversionista
una
forma
eficaz del
pago de
los
dividendos correspondientes a sus inv~rsiones;
b) Interesándole
al
inv e rsi o nistas la se guridad en
sus
inversiones,
no
le
conviene
una
pa uperiza-
ción gradual del paí s
en
que
tiene colocadas és -
INDUSTRIALES
JORNADAS
tas, que pueda conducirlo
a la "insolvencia, ·misma
que se evita mediante una
intervención temporal e n
los cambios.
4) Se critica el intervencionismo estatal que el
control de cambios supone y
la burocratización en el comercio exterior d e l país que
lo implante, d e rivada de tal
interven c ionismo.
Frente
a
esta objeción debemos indicar
que:
a) Vemos e n el
control d e
cambios una medida
de
emergencia
no definitiva
y
q ue no
sostenemos
. intrínseca
bondad,
b) Se puede implantar en tal
forma,
q ue las licencias
de importación o exportatramiten con ra-
pidez y de esta manera se
entorpezca al
mínimo el
desarrollo del
comerci o
exterior del país;
e) Se escoja un mecanismo l o
más simp lista posible,del
cual ya existen modelos
en otros
países,
o
•
Es de este análisis objetlVO, de donde hemos deducidb la conve~iencla que dentro del actual contorno ec~
nómico y financiero -~ el palS
existe par~ la adopclon ~e un
sistema de intervenclon en
los cambios, como. medlda de
rigurosa emergencla. Al ex-
. .
sólo·
presar estas op1n1ones
perseguimos un propÓSlto: que
el panorama del país se clarifique mediante la aportación de la opinión de todos
los sectores interesados en
el destino de México. Nuestra
actitud es de franca colaboración con el señor Presldente de la República y conslderamos que el actual momento
exige la adopción de med1das
austeras, apoyadas firmemente
por 1 a conjunción de todas,
sin excepciones, las volunta•
des de la ~ación.
su
s1no
su conv e niencia
ante una
situación anormal;
ción se
ello sería sencillame~te de&oledora sobre el dest1no del
p apa Í s y sobre su capac1dad
ra gobernarse aslmlsmu.
13
INDUSTRIALES
y en su
funcionamiento
se cuente
con la
representación de
productores e importadores.
5) Se habla en el caso
de México de lo difícil e 1mposible que resulta evitar la
corrupción en los elementos
que eiercen dicho control, y
la falta de personal técnico
a de e u a do. Dudamo s que en e 1
país no existan elementos aptos y honestos para admini s trarlos pues la admisión de
Primer Vice-Presidente, Sr .
Presidente, Sr. Jor ge M. H:ynsde:.'v-ice-Presidente, Sr. Antlfnio
Ing. Agustín Fouque.- Seg
d , othelet.- Segundo Vocal,
. P rlmer
·
Vocal • S r . Arman
o 1"1 Sr Ing. Ernesto Macles
·
Arellano.y·
.
G
d 10
. la _Tercer
oca •
·
J -·
Sr. Anton1o uar
·
d
la Peña y Sr. · rng.
ose
Joaqu1n
e
Sauza.- Asesores.. S r . Gral.
.
.
Sr José
R. Co lln.- T esorero,
Crowley. - - Asesor Extraordlnar~o, ta.rio General. Sr. _ Lic. HécSr. Francisco Salas Arro yo .ecre
tor llarona.
o
o
JORNADAS
producciones que amplien
0 uestroa renglones de exportación y oos permitan satisfacer ciertas demandas de
MEXICO Y SU PETROLEO
consumo interior.
Si observamos tan siquíera superficialmente nues-
Oiscurso.
pronunciado por el senor
J orge M.
H
P
eyser,
res1dente de la Cámara !';aciana] de la
Industria de Transformación.
tra economía nos
Señores Miembros de la Comisión de R epresentantes del Congreso
Narte-Americano que nos visitan
Señor
canos. Antonio J. Bermúdez, Dire~tor General de Petroleas MexiSeñores:
El recorrido que acabamos de realizar por esta zona
1ndustrial no es un simple .
acto de cortesía, n1 constituye un acto ajeno a la misión de observación y estudio que an1ma a la Comisión
de Comercio del Congreso Norte-Americano en su visita a
nuestro país. Por el contra-r~o este recorrido engarza
d1rectamente c on el obje tivo
de su viaje, dado aue hemos
visto hoy, un esfuerzo de
nuest1o país vinculado a su
tarea inmediata: la diversificación de sus producciones
a través de su industriali~
zación.
México señores,
está em-
peñado en la obra de indust'ria· lizarse por .haber llegado
a la conclusión de que éste
e~ el único método de que
d1spone para elevar lo~ niveles de vida de su población.
Esta industrialización nn supone que nuestro país pretenda impulsar industrias a toda
costa, sin medir su fun c ión y
a da p t ~ b i 1 i dad a n u es t ·r as re a-
1
11
lidades. Nuestro país pretende obtener un desarrollo industrial racional y progresivo,
est o es ,
queremos
una
industria que esencialmente
transforme nuestras propias
materias primas,
que
cubra a
M~xico
de enrarecimientos cíclicos, que nos permita mantener un
comercio
exterior
sano y creciente y que asegurando el progreso de nuestro
país no le sione el equ1librio
económico de este hemisferio.
Estamos alejados de todo
propósito de auto-suficiencia
y de cualquier nacionalismo
económico de tipo agresivo.
Nuestr~
meta
es
m~s
modesta
y por lo mismo factible. necónocemos la necesidad de que
las producciones del mundo
sean ordenadas, regu] adas de
tal manera que en ningún país
se mantengan producciones - que
eter~a~ente se
sepan antieconomlcas, pero al m~smo
tlempo, por razones de
elemental estabilidad económica
para nuestro país, requerimos una diversificación de
15
JNDUSTRIALES
percatamos
de inmediato que México hasta
el presente, ha tenido un comercio exterior fundado en la
exportación exclusiva de materias primas o productos naturales siend o unos cuantos
estos renglones. De esta- situación deriva para nuestro
país una causa permanente de
inestabilidad, dado que basta
una pequeña fluctuación en el
precio de alguno de nuestros
productos · naturales de exportación, una disminüción en su
coQsumo o bien un incremento
P.n otra región productora,
para que . México se enfrente
de inmediato a una situación
local de depresíón. 1odos sabemos, por ejemplo, 1 o que
signific~ para México ~na
baja en el precio internacional de la plata o una producción competitiva de henequén en otras áreas.
Desgraciadamente además,
nos encontramos con que algunos de nue~tros exiguos renglones de exportación son de
aquellos en que existen excesos crónicos o bien son de
tal naturaleza que su demanda
in~ernacional no es susceptible de incrementos apreciables. De aquí deriva que el
progreso de nuestro país no
pueda cifrarse en la exportación exclusiva de sus productos naturales y la impar-
tación de las manufacturas
requeridas por su escasa población con poder adquisitivo. Las consecuencias de que
tales directrices siguiesen
orientando nuestra economía
se traducirían en el mañtenimiento de un margen de población económicamente pasivo,
esto es,
prácticamente no
e o n_s u mi d o r
y
de
pr odue ei ón-
escasa,
una
economía de
con
tipo consuntivo.
Tal es en esencia la industrialización que propugnamos . Queremo~ que los productos naturales q ue el país exporte llev e n incorporado el
maximo trabajo nativo y aspiramos a que México disponga
de un sistema industrial ade
cuado para la satisfacción de
muchos de {os habituales consumos domésticos. Sólo en esta forma consideramos posible
que el país supere su depenJencia a la exportación de
escásos productos naturales y
~vite los r1esgos e inestabilidad provenientes de esta
dependencia.
En este proceso de industrialización o mas acertadamente de diversificación
de producciones, partimos de
una premisa: 1 a necesi dac:i de
que
esencialmente
nuestra
economía resulte complementaria de la de los Estados Unidos. Sin embargo, esta complementaridad de producciones, no debe entenderse bajo
ningún concep-to c.omo una absoluta no coincidencia de
pro.ducciones. Esta i nterpretación pecaría de estrecha y
a r t i f i e i a 1 . De e s t r e eh a e n
16
JORNADAS
virtud de que ella nos redu-
c~ría
a una situación econó-
mi:a . meramente colonial haCiendonos exportar exclusivamente ciertos productos naturales e importar absolutamente todas las manufacturas
d7 consumo doméstico. Artificial~ en cuanto dicha coincidencia de producciones ya se
da,naturalment~ entre ambos
paises.
El desarrollo económico
de México sobre la base de la
di~~rsificación de sus producc1ones,
amerit~rá
nécesariamente
cambios esenciales
en el Intercambio come rcial
de nuestros países. Manufacturas de producción nacional
e ~ que industria s nativas es :
ten en condiciones de satisfacer la demanda interior
no tie·nen que ser importadas:
Importaciones de · lujo a superfluas t1enen q ue ser suprimidas, pues nuestro desenvolvimiento económico exige una orientación- conveniente de nuestra economía, en
la cual no hay lugar para el
despilfarro. Sin embargo, estamos convencidos que a la
larga &.igu.iendo esta linea
económica, el inte-rcambio comercial México-Americano se
Intensificaría a ·grados máximos, puesto que .al aumentar
nuestro poder adquisitivo
forzosame~te importaríamo~
mas de los Estados Unidos.
Ahora que, nuestras import~ciones sustancialmente
cons1st~rían en bienes de
produccion y subsidiariamente
en bienes de consumo. Quiere
esto decir que lo que habría
JORNADAS
INDUSTRIALES
que modificar son 1 os cauces
del Intercambio comercial
entre ambos países, sob re la
base de que esta modificaciór
redundaría en beneficio de
los dos.
Un vecino pobre difícilmente es un buen vecino. La
pobreza sólo origina resentimi:ntos y en el caso de los
paises e~acerba sentimientos
nacionalistas que casi siempre desembocan en un chauvinismo puramente negativo .
Nuestro desarrollo económico,
es un elemento que tendería a
hacer que las relaciones con
los Estados Unidos fueren cada vez más cordiales y mutuamente provechosas.
.
En
es tos
momentos'
como
lo ha expresado el Honorable
Diputado señor Charles A
Wolverton, el petroleo se h~
convertido en la sangre del
mundo y su demanda constante~
mente creciente, hace que la
producción petrolera de México, pueda contribuir a satisfacer necesidades inmediatas
y abastecimientos futuros.
En la colocación conveniente
de nuestro petroleo estamos
Interesados, tanto Mexico co··
mo los Estados Unidos. México
en cuanto dicha colocación
puede ser · una fuente de re.:
curso.s que l _e per_mitan regularizar su SituaciÓn económica y acelerar su desarrollo·
los Estados Unidos en tant~
que la a~tua1 inter-dependenCia economica mundial los hace desempeñar un papel primordial en la marcha del mundo.
Pero en torno a esta mu-
tua conveniencia existen una
. 3-erie de pFoblemas que los
pneblos . amigos deben abordar
frontalmente para evitar que
ellos frustren los mejores
propósitos. A México interesa
que sus exportaciones de petroleo signifiquen para el
país l a a fl u en e i a de mate r i as
primas imprescindibles y
equipos, maquinaria e implementos agrícolas, q~e vengan
directamente a impulsar su
desarrollo económico, permitijndole incrementar su producción agrícola y fo me ntar
su desen~olvimiento indu s trial. Aún cuando comprendemos las excelencias de muchos
bienes de co~sumo norteamericanos, no queremos que los
recursos que a l
sen,
se nos
país In gre -
vayan en imp ort_a-
ciones superfluas.
Nuestra
economía
tiene
que estar debidamente compensada y por hoy tenemos que
proceder con extrema cautela
en nuestras
importacion es,
canali~ándolas
de tal manera
que éstas comprendan bienes y
servicios que realmente vengan a enriquec~r al país y lo
ayuden a sanear su economía e
impulsar su progreso.
Comprendemos las dificultades que en el presente
existen para que los Estados
Unidos en su papel de único
abastecedor de ciertos bienes
de producción y de ciertas
materias
primas
e
interme-
dias, puedan satisfacer ab3olutamente todas las demandas.
La realización del ~lan de
Recuperación Europea y la
satisfacción incluso de im-
.17
INDUSl RIALES
Vurtantes demandas Interiores
diferidas, dificultan en grado extremo el cumplimiento de
los requerimientos de todos
los países. Le esta situación
deriva que el Presidente de
los Estados l.inidos con fecha
17 de n oviem bre de 1947, pidier a al Co n g reso Norte-Ameri cano que se vigorizara la
vi g i l a n e i a ·sob re la s exportaciones y
se
le
aumentaran sus
facultades al
respecto,
mando en
ocasiÓn,
esa
prescindible que
afir 1 o i mresulta que
las reme sas americanas vavan
a lu g are s o paises que ~ás
las necesiten.
Quiere esto decir, que
encontramos dificultades en
adquirir bienes d e producción
y materias p ri mas de o ri gen
n o rteam erica no,
que
son
esenciales, para e l funcionamie~to
corre c to de nuestra
economía y para acel e rar
nuestro desarrollo. Ahora
bien, como afirmara el Ho norable diputado señor Charles
A. ~olver ton e n reci e nte entrevista a la prensa, la demanda mundial de petroleo va
en constante aumento y pocos
países disponen de reservas
técnicas adecuadas, derivando
de ello, la posibilidad de
que nuestro país pueda jugar
un papel de cierta importancia en el abastecimiento mundial de petroleo. Nosotros
aspiramos a que este papel
se traduzca para México en
disponibilidades de equipo y
materias
primas
amer1canas,
que por el momento, nos resultan difíciles de conse¡>ui r
y r~ecuentemente impostble.
18
¡
1
1
¡
JORNADAS
No pretendemos que la
rehabilitación y recuperación
de Europa hacia una producción plena y un empleo máximo, sea im pedida por atender
a las necesidades de lo s países latinoa me ricanos. Comprendemos que el mundo es una
unidad y que mientra s exista
un continente dislocado es
imposible restablecer el
equiltbrio económico mundial
y 1 a misrró v uelta a la normalidad. Pero si no qu~remos
estorbar ld recu pe ra c ión eur opea , Lcmpoco deseamos que
ésta se funde en el deteni~ iento o retardo del desenv o lvimient o de los pueblos
in c ipiente me nte desarrol lad os
de es te hem is fert o.
Lo s Est ados Lnidos tienen ante sí el problema de
lograr un arm6nico equi-1 ibrio
en la satisfacción de las necesidades del p r ograma de recuperaci ó n europea y las de
los planes de desarrollo de
los paises de ~s te hemisfe~
rio. Este equtltbrio es sobre
todo esenci~l e n lo que t oca
a decidir los sumi nistros de
herramientas y maquinarias
de toda e 1 as e . Si e 1 des envolvimient o económico de
los
países de la Améri¿a Latina
se detiene o retarda por las
demandas del programa de {ecuperación ~;uropea, la normalidad económica internacional
no se logrará y la reestructuración del mundo será imposible. La interdependencia
económica
internacional
es
inviolable e ineludible
En un memorial enviado
por un alto funcionario nor-
INDUSTRIALES
JORI\r\DAS
team~ricano al Congreso Económico Social Inter-Americano, textualmente se afirma
sobre esta cuestión: "Los artículos de consumfr necesario
y equipos que hagan posible
un aumento eficiente en la
producción de la América L a tina, y la exportación de artículos esenciales a la recuperact ón e uropea, deben
abastecerse con la misma eficiencia" y más adelante en
este mismo documento se
es-
table ce: "E s esencial, que
l o s controles de exportación
sean administrados equitativamente con la mira de mantener, lo mas que sea posible,
la continuación del desarrollo económico de otras re públicas amertcan~s· · . Estas palabras pueden seguramente se r
suscritas por cualqu ier Industrial latinoamericano, dado que- e ll as sólo afirman la
necesidad de que el proceso
de desarrollo de nuestro s
países no sea interrumpido
por la satisfacción de las
demandas del plan de recuperación europea.
Quer emos pues dejar claramente. sentado que no s intereS a n ~ n U e S t r-a .S e X pOrta C i On e S
-las de petroleO'. entre ellas
con su especial importanciaen cuanto ellas pueden traducirse e~ la afluencia al
país de herramientas, equipos
y materias primas de que sólo
los Estados Cnidos pueden
abastecer.
Incidentalmente quisiera
también referirme a las inversiones de capital amertcano en nuestro país. Hemos
vi~Co
que
a
~l~imas
fechas
estas inversiones se orientan
determinadamente en el tipo
de inversión directa. Nue& tra
opinión sobre las inversiones
in,ernacionales es bien clara: creemos que las inversiones son necesarias tanto para
el país exportad o r de capita les como para el i~portad o r.
De aquí dedu c imos la co nveniencia de que con plena serenidad sean reguladas estas
inversiones,
de
tal
manera
que se eviten lo s trastornos
y mal entendimi e nto s que en
el pasado han sido frec uentes. Por lo p ronto, creemos
que sí l os inversioni5tas
cuidan que sus inv e rsiones
vengan real me nte a au~entar
nuestra renta nacional, n o
estén encaminadas cuando sean
directas a eliminar indu s trias
nativ as
~strictamente
y se su .ieten
a nue st ra le-
gislación, los inversionistas
podrán encontrar se~uridades
en ellas y dividendos razonables. Ha y que e,·i tar que la
arrogancia del inversioni sta
y el resentimiento de los na-
I'\'DUSTRIALES
19
tivas de los países obieto de
inversiones, pue~an engendrar
rozamientos y choques, que
ha ga n que un método que como
las
inv ersio ne s
interna c i o na-
les pued e contribuir a la estabilizaci ón de nuestr os países, sea frust rado. Las
orienta c ione s que una Comi ••on como la que hoy nos visita ~uede dar en su país,
serán
segurame nte
de
g ran
utili dad .
Finalmente no quisiera
terminar sin señala r que nosotros
sent~ mos
los
mexica nos,
n os
orgullosos de poder
demostrar nuestra ~apacidad
pa ra administrar nuestros
prop t os recursos y que la
l abo r efe~tiva y por todos
c o nceptos encomiable del señor Senador Antoni·o J. 13e rmúdez al frente de Petroleas
Me xic anos nos da una prueba
tan gib le de dicha capacidad.
Al telicitarlo a él por su
l abor, no s felicitamo s a nosotros mismos y nos aseguramos en las esperanzas que sobre el futuro de Mexic o tenem os.
21
JORNADAS __INDUSTRIALES
pran bajo las condiciones_más
favorables, en· todo sent1do.
Asimismo, cada país compra en
el mercado internacional en
donde pueda obtener el tipo
de artículos que su economía
requiere, preferentemente, a
precios convenientes.
LA POLITICA COMERCIAL y
LOS EFECTOS DE LOS CARTELES.
LA INDUSTRIALIZACION
. _ La industrialización de
Mex•co está detenida actualmen~e _ por la ausencia de una
politica comercial b ien definid_a, aplicada con entera
consis~encia,
en
todos
sus
:spectos. Las me di das que . se
an venido tomando ha sta aho ra, obed ecen má~ que al deseo de promover la indust~ia
a nec es idades fisc ales y monetarias.
ORGA~ISMOS
ESPECIALIZADOS.
Si el Gobierno f ede ral
a serio la promesa
de Industrializar
a] pa1s,
•
h
.
ya
se
ubieran fijado al-gunas
bases fundá _m entales, sobre
las que esa Industrialización
h. a de descansar.
Para p r i n·c i p i a r , 5 e n e _
cesita ya un organismo
espeCial, que tenga como encargo
exclusivo
estudiar 1
didas
ue' d .
as meq
po rlan adoptarse:
e!l l o arancelario; en Jo que
re specta a tratados de comerCio e n general· en lo que
tom~ra muy
concierne a conv~ ni os hilate- _
rares. trueque, puertos li_ bres, política fi sca l, s ubSidios, aforos, disposiciones
administrativas.El país cuenta _con un arsenal de ma teria s
pnmas, cuya utiliza ci ón debe
estimulars e por las i~dus
trlas _nacionales. Las industrias nacionales producen ya
una varledad de artículos
elaborados
y sem i-elabor a d os,
.
cuyo con s um o por otras industrias~ por _ los individuos y
por e_l gob" erno mismo' rlebe
r~ciblr preferenci• sobre artlculos _ similares en calidad
y precio, Importados.
~ISCBIMINACION
CIO.
EN EL COMER-
México no puede darse el
lujo de no discriminar en su
comercio exterior,
tanto en
lo que respecta a exportaciones como a Importaciones. El
mundo de hoy es discriminante: tada país comercia con
aque los países que le ofrecen los meJ-o res precios
por
sus mercancías y que las com-
El estudio de las condiciones bajo las cuales México
está comerciando, no puede
aplazarse por más tiempo. Necesitamos saber que parte de
las importaciones mexicanas
están sujetas a convenios
privados,denominados de "carteles y monopolios". Todos
sabemos que estos " gobier no s
privados"'. controlan las cantidades y los precios de sus
-artículos exportables, de modo que su importación, por
parte de México, está sujeta
a condiciones que .ni los mismos tratados de comercio, celebrados con los países que
albergan esos "gobiernos privados", pueden cambiar 0 alterar.
Ce la misma manera, hay
que averiguar con exactitud,
en que condiciones se venden
los prod~ctos mexicanos en el
exterior, especialmente las
materias primas. No todo lo
que se exporta de México es
un producto mexicano, en el
sentido de que la empresa que
los produce o que controla su
exportación, tiene capital
mexicano,ni aún en una peque-
ña proporción. La descapitalización que sufre el país, a
consecuencia de estas expor-
taciones -que son generalmen~
te ei producto de inversiones
extranjeras directas- no se
puede medir, pe ro es ob.-i a.
Estas exportaciones, producto
del suelo mexicano, no son
mexicanas, porque su valor
exportado no regresa al país.
\demás, los industriales meácanas que deseen adquirir
_es tos pro duetos , ti en en qu e
pagarlos a los mismos precios
a que se venden en los mercados extranjeros, de ta 1 IJianera que México no fija los
precios ni aún de sus propios
artículos
nacionales,que aho-
ra se exportan con pérdidas
al país, ya que algunos de
el los podrían someterse a
procesos más complicados y
más técnicos de elaboración.
Esto último dejaría mayores
ganancias
internas,
permi-
tiendo que un númer-o mayor de
mexicanos, en 1 a for ma de salarios y jornales devengados,
transportes y otros ~ervicios
propios de los procesos de
m a n u fa e t u r a , q u e de n en e 1
país, en lugar de que esos
mayores jornal es, sal arios y
se~vicios
est~n
en
mano~ de
los 10iudadanos del país al
que ahora se exportan.
MATERIAS PRIMAS-.- INVERSIONES.
El pais necesita pues
una política sobre materias
primas y sobre e 1 producto .d,.
inversiones JirectAs. Este
último punto nos trae a otro
igualmente trascendente para
la economía del país: ¿Cuál
debe ser la actitud de M~xico
22
ante las inversiones prlvadas
d l re e t as ? . Debemos pe r mi ti r
la~ lnverslones directas
a'
en lo. s casos en que esas' inun
versiones !as efectúen monopollos Internacionales
co
efectos detractores pa~a In
economía? ¿o debemos permi~
tlrlas solamente en el caso
en que esos car~eles ~mono
pollos no Intervengan? ¿Cuál
debe ser la política a segulrse, en lo que co n c ierne a
l os altos interes es y divi~end~s que las empresas extranJer 2s inversionista~
pu;den sacar del país? ¿ u ~
p~ls pobre en capitales come
Wex•co , debe permitir la sal• da . t r res t 'r in g id a de ere e i dos lntereses y dividendos
a~n
en
Ios _ casos en
inversión
•nicial
nula? . ¿~o debería
que
la
fué casi
apiicarse
una polltlca fiscal adec~ada,
Jue estlmule la re-inver si ón
e gananclas de las compañías
extranJeras,en lu ga r de adopta~se una políil ca de lai sse z
fa1re su1c1da?
·
ARANCELES y TRATADOS DE COMERCIO.
.
, En -m a~eria atancelaria
¿cual e~ el tipo de tratado ~
e o n v.e n 1 o e o me r e i a 1 q u e más
co nvlene a la etapa económica
e Industrial por la que atravesamos? ¿Debemo s comprometer
en tratado o convenio alguno
más del lO o 20 o 30% d~
• 1
JORNAGAS
JORNADAS INDUSTRIALES
~ue~tro
comercio exterior?
tCual~s . son las concesione~
que Mexlco debe obtener en
l os convenlos y tratado s de
com~rclo que celebremos de
-ho~ en adelante? iCon cuáles
palses debemos fomentar esos
tratados ' prlDClpa
·
·
1 mente
y
con cuales no nos inter~sa
celebrarlos por ah~ra?
.
Cada aspecto de
polítlca comercial nos su g iere
1nf1n1dad de preguntas y a
cada pregu nt a que nos formulamos encontramos la respuesta adecuada a los intereses
naclona!es. y en cada respues _t a oponemos la práctica
eco nomlc a y comercial que seg u•mos en la actualidad· y 1
balance es un desacie,rto e
u~a- desorientación en la o:
l1t1ca comercial del pa1s,que
- p
augura desastre para el futuro cercano.
la
FORMuLEMOS LA POLITICA COMER.CIAL.
La ~olítica comercia!
que el pals ~ecesita debe s~r
cons¡stente con sus aspirac~ones de Industrialización
No ~e puede_ni se debe habla;
de ~ndustrlalización en un
vaclo, desconectado de las
realldades nacionales e ignorando las tendencias económic~s lnternacionales,que cons~1tuye~ las realidades de caa p a 1 s . Re pe t i "'o.s . no se
puede aspirar a hace; de MéXlco ~na gran nación y hacer
que Mex~~o se comporte como
u~a naclon vasalla, sin propos• tos definidos y sin metas
que alcanzar.
Este es el momento adecuad,o para formular una nueva
po!ltlca comercial , que encauce al paí_s por los derroteros de la lndustrialización
y del tipo de fomento eco nó~ico que nos asegure un rápi-
do aumento de las rentas nacionales y de los niveles de
vida del pueblo trabajador.
La política comercial es la
clave de la industrialización. México necesita ya de
un organismo especializado en
donde se estudien estos múltiples aspectos de su industria 1 i ~a<" i ó n . No n~ e es i tamos
d~ gente de buenas intenciones solamente, sino muy principal!J!ente, de gente preparada en los aspectos técnicos
de la economía y de la indus tria, gente r esponsable, patriota,
honrada ,
co n
fe
en
lo s progresos q~e el país
p uede y debe realizar en un
futuro próximo. En México ha y
- ya mucha ge nte que reune es tas condiciones de h o nrad ez ,
capacidad, energía, visión.
Hay que ponerlas a trabajar
en la tarea que e l país no
puede ya posponer,
a menos
que todo este humo ~ue se levanta hoy, como indicio de
las candentes a spiracio ne s
populares, se transf o rme en
cenizas de buenas intencione s
y demagogia .
DE~CNCIA
DE TRA1ADOS LESIVOS.
Este organismo especializado que proponemos, debe
examinar enseguida, los tratados de comercio vi ge ntes y
proceder a su denuncia inmediata, cuando esos tratados
constituyan un estorLo al
progreso industrial d e l país.
La crisis económica y finan..ciera por la que atraviesa el
23
I'NDUSTRIALES
país en estos momentos, deriYa en buena parte de la ausencia de buenos tratados,
favorables al desarrollo de
'México y de s u s industria s . Y
en esa crisis tiene Luena
responsabili dad los malos
trata dos existentes, como el
tratado de comercio co n los
Estados Unidos, que no permitió al Gobierno ~ederal prohibir l~ s importaciones dañinas v de lu jo, porque su im:
portació n había quedado com prometida en ese ~ tratado de
comer cio . Por cu lpa de ese
mismo tratado que denunciamos
con toda sinceridad, como da ñ ino a los
n a 1e s ,
intereses na c iot ampo e o pudo
~1 ex i e o
auw-entar
sus
aranceles
en
la
forma en que .se hubieran e liminado muchas de la s importaciones que han venido restando las reservas de oro y divi s·a s , a e u mu 1 a da s d u r a n te 1 a
guerra y la s que debieron
utilizarse en su integridad,
para el respaldo del crédito
a la indu stria y para salda r
deuda s internacionales
co ntraída s por la importación de
equ1po y maqu1nar1a.
El primer paso positivo
en la industri a liza ción de
México es la denuncia impostergaLie del 1ratado de Co ~ercio con lo s Estados Cnidos
Mientras subsista ese tratado
y subsistan las import acio nes
dañinas y s uperfluas, será
difícil estabilizar nuestra
moneda y sin mone da estab l e,
no podremos encauzar la eco n omía nacional por la senda
del progreso y del fomento
econ Óm lCO qu e
ta nto n ecesita -
24
JORNADAS INDUSTRIALES
mos. Es una actitud execrable
y cobarde el dejar que la
presión del Departamento de
Estado no nos permita denunciar ese tratado, como nocivo, des favorable y causante,
en buena parte, de la actual
crisis mexicana y de la deva1 u ación de _ nuestra moneda.
EL CAPI1AL NECESI1A CLIMA
fAVORABLE.
El país necesita industrias y necesitan esas indusirias de capital para ponerlas en marcha. Pero antes de
que se pueda hablar de futuras industrias, es n~cesario
crear el - el ima apropiado que
ga rantice al capital de riesgo,
que
su
inversión en esas
industrias está garantizado
co~tra
.1
_¡
su
desaparición,
ante
la cowpetencia desleal de impo rtaci ónes similares. Sólo
cuando el capital tenga asegurado sus rendimientos adecuados, podremos exigir al
capi talist a que invi e rta su
dinero en la i~dustrializa
ció n de M~xico, en lu ga r de
invertirlo en el comercio de
importación, en donde goza de
rend-imientos e-q-uivalentes a
una tasa de interés de 30 y
hasta de 50% anual.
MIREMOS HACIÁ ADENTRO.
México no debe mirar ha-
cia afuera en busca de capitales para fomentar sus industrias. El país bien puede
encauzar su desarrollo preponderantemente con los propios recursos de la nación.
Pero para ello es necesarjo
un plan, una meta y consistentes con ese plan y esa meta, una política industrial,
monetaria y económica, que
permita al país invertir sus
ahorros en la clase y tipo
de industrias que queremos
establecer. Las inversiones
extranjeras privadas son muy
costosas,
porque
hoy,
esa
clase de inversiones vienen
sólo a fomentar la explotación de materias primas o a
apoderarse de industrias mexicanas ya establecidas. Y
sobre
todo,
esas inversiones,
responden a un plan político
de los países a los que per- tenecen los inversionistas.
La inversión de capital en el
siglo 20, no es la inversión
Úpo siglo XIX. La penetración económica que realizan
los _grandes monopolios y carteles internacionales hacen
más daño que bien a países
como México, porque nos descapitalizan y nos someten a
presiones políticas extranjeras peligrosas, en estos momentos cuando antes que nada,
necesitamos del máximo de independencia.
PERSPECTIVA
-MENSUAL
l
{
1.- LA INfLACION EN LOS ESTADOS UNIDOS.
Recientemente -el 29 de
Julio de 194 ~ - el presidente
de lo s Estados Unidos señor
harry S. 1ruman envió al Congreso un plan tendiente a
volver los precios al ni vel
que tenían en noviembre del
año pasado, y a implant·ar un
estricto
control
como
en
tiempos de guerra ·, sobre salarios, distribución y crédltos. Este ¡í lan tenía la finalid ad de combatir · la tremenda
inflación que existe en los
Estados Unidos.
El Presidente 1ruman
compareció personalmente ante
el Congreso y pidió a éste
que hiciera frente a una li s ta de 18 problemas naclonales
entre los cuales destacan' el de los altos precios
y el de alojamiento. El Presidente Trumao encareció al
Congreso tomara las siguientes medidas:
1) Acción de parte del Estado para resolver la crlsis de la educación y el
co n gest ionamiento en
las
escuelas;
2) Elevación del salari o mínimo,
cuando menos a 75
cen~avos
por hora;
_
3) Ratificaci ó n del Conven1o
del tri go pa r a garantizar
a los agricultores amerlcanos un mercado de exportación de 185 millones
de busheles a un precio
justo durante los próximos 5 años.
En lo que se refiere al
alto costo de la vida el Presidente Truman propuso un amplio programa contenido en
los 8 puntos S i g Uien tes:
1) Establecimiento de un 1mpuesto sobre el lu c ro excesivo;
2) Restablecimiento del con trol de crédito del consumidor;
.
3) La regulación de l os creditos bancarios;
regulación
sobre la
4 ¡ La
especulación en la s coti·
zaciones de géneros;
5) La asignación de gé n eros
escasos;
6) El robustecimiento del
control de la renta;
2 ~¡
JORN .<\DAS
7) Autorización
uso del
para hacer
racionam ien to si
es necesario·
B) Facultades
p~ra
controlar
los
precio s de 1 os géne-
ros
escasos;
y para
con-
trolar
lo s
sal ari os en
_l os casos en que el ajuste de éstos
puede provocar _la
ruptur a de
los
precios topes.
Ase~uró el Presidente
Truman que el costo de la vida ha alcanzado el nivel más
alto en ef curso de la história, y que actualmente el
pueblo de Estados Cnidos tiene que gastar todo lo que gana para ma l comer.
. El Co ngreso contestó ne~a1Ivamente a las peticiones
e
Pre~IdentP. Truman.
co n
excepclon de dos ~ unto~
son los s1gui c nt e s:
que
l. - Se f;;cu] La 2 IJ Junta de
Gobernador es de] Sistema
de
l a flese rva
Federal
para limitar has ta el ! S
de marzo de
1949 las
venta s a plazos .
2. - Los banco~ asociacios dr
INDUSTRIALES
JORNADAS
la reserva
federal mantendrán certificados oro
por no menos del 35% de
sus depósitgs; y no menos ·de 1 40% ·de 1 os
bi _
lletes . que hayan emitido
Y este~ en circulaci6n.
(La le gislac ión en vigor
exige una
reserva del
25% para cada una de esta s categ or ías).
Es decir, el Congreso
pasó por alto el resto de las
petiCiones, aduciendo que con
las facultades con que actualmente cuenta el ljecutivo, estj en aptitud de comba tir la 1nflaci ó n.
. En r e la c iÓn con esta ma teria, e] economista Nadler
ha dicho que es pelig r oso se
eleve el p re s upuesto militar
a _mas de 20 ,0GU millones· de
dolares anual es ' pues esto se
traduciría
e n una mayor
es~
casez de productos y en mayo res p~eclos~ todo lo cual
c_ausarla una
lnflaci6n t e rripaís a
ble que llevaría al
la ruina.
2. - EL PETROLEO y EL PROGRESO CE MEXTCO.
ti progreso que pueua
ograr nuestro raís
estar 2
en relación di,ect~ con el
grado de Industrialización
alcanzado.
.
.
De ello deriva Ja nec e Sidad de incrementar al maxi mQ una de nuestras principales Industrias: 12 pe tr o l~
ra.
.
Ahora que Mexlco atra 1
v 1 eds a
po r
es
ex t r P iT' a
e
un A
f! r ave e r I si.;
u r g en e 1 a [o m en~
ta~_la producción petrolera
a
I~ de exportar la ma or
cantidad posible
d
Y
manera
1
.
' y e esta
'
~
mismo
tlempo
que
se abastece al mundo d
tr o l eo -qu e tan escaso
e peseencuentra de é l- n os all e ga mos d ó lares que tanto n er.~
Sita~os
para la compra de
equlpo y materias priwas indispensables para el d
!lo del país.
esarroCo n 1 as . u 1 ti ma s ex p 1 o r" -
cienes y · descubrimientos de
pozos, real.i zados ba~ o 1 a administracion del senor Senador Antonio J, Bermudez, se
ha revelado la inmensa riqueza petrolera que posee nuestro país; riqueza que presenta grandes perspectivas, ya
que el mundo -ahora más que
nunca- s1n petroleo no se
mueve.
- Es sabido que los Estados Unidos a pesar de su gran
producción, desean acumular
mayores - reservas,
en
21
INDUSTRIALES
previ-
sión de una posible emergen- .
cia. Por otra parte, los Estados Unidos han contraído
fuertes compromisos de acuerdo con el Plan Marshall; más
del 20% de las apropiaciones
del Plan Marshall serán dedicadas a la compra de petroleo
para st. envío a Europa.
En el Congreso Norte Americano se ha dicho que era
inconcebible que se invirtieran - fuertes cantidad~s en el
medio o rient e, cuanrlo en Mé XlCO -país vecino y amigoexisten fuertes cantidades,
lo cual representa grandes
ventajas. Se habló asímismo
de observar una posición respetuosa frente a Jos derechos
y necesidades de ambos países.
Esto parece que se corrobora, con los conceptos
verdidos por el señor Wolverton, delegado petrolero estadounidense, el día 19 de
presente en esta Ciudad,
cuando declaró: "Es
deseo de
los Estados Unidos obtener
la cooperación de México para
hacer frente al problema de
fa escasez y aprovisionamiento apropiado de petroleo al
mundo entero. Es propósito
firme de los legisladores
norte-americanos no inter..,.·· · -
nir en forma alguna en los
acuerdos que Mixi c o tome al
respecto, pues éste es un aspecto que exclusivamente le
toca decidir en uso de su soberanía."
Si los Estados \,;nidos
observa n la política de 1 buen
vecino y no pretenden adquirir qemasiado barato nuestro
pet role o, basándose en la
necesidad que tenemos de
equipo y maquinar ia para el
fomento de nuestra industria
pet r olera co n fines de ex portación, y
se mu estran res-
pe tu osos de 1 as 1 e y es mexicanas, estas negociaciones llegarán a feliz tirmino en bien
d e ~! i x i e o , d e 1 o s Es t a d os
Unidos y de la Paz mundia l.
3.- CO~VENIO INTERNACIONAL DEL TRIG O.
Como se recordará, el 29
de julio de este año, el Presidente Truman se dirigió al
Congreso para pedirle que ratificara e l Convenio Internaci onal del Trigo, mediante
el cu~l se garantizaría a los
agricultores norteamericanos
un mercado de exportación de
185 millones de bushels a un
p re e i o j u s t o durante 1 os p róximos cinco años. El Con¡?reso
contestó ne gativamente a esta
petición. In glaterra ha anuo -
JORNADAS
ciado que en vista de qu~ el
Gobierno Norteamericano no
había ratificado el reciente
Convenio sobre el Trigo, se
retira del mismo. Se anuncia
asímismo que Australia y Canadá se retirar o n.
El Convenio a que hacemos menci ó n pertenece a la
serie de Convenios Inter-gubernamentales que se han firmado y rec o nocido por muchos
países, pero que hasta la f.echa, no han tenido validez ni
resultado alguno.
En relación con esta materia, recordaremos que el
prime r Convenio Internacional
del Tri go , después de c elebradas una se ri e de co nferenc ias en la Ciudad de Londres,
fué firmado el año de 19 33.
E-ste Convenic fué s1gnado por
22 países y r a tifica-do por
todos con exce pc ión de Irlanda. En el mismo se acordó
fiiar las cuotas de exportación,
pero no se
creó la ma-
quinaria que ha b ría de enfocar las decisiones. La imposibilidad de lle ga r a un
acuerdo dentro del Comité
Consultivo del 1ri go, originó
la - suspensi ó n de hPcho del
proyecto en su fase inicial.
Los países signatarios
-se habían comprometí do a reb a .i a r l-as de r e eh os so b re 1 a
importación de trigo una vez
que el precio basico seleccionado hubiera fluctuado
durante 16 semanas más alto
d e )0. fí 3 o r o bu s h td . Lo que
ocurrí ó en realidad fué que
los precios bajaron en lu gar
de subir, :le modo que esta
promesa de acción no se tra-
INDUSTRIALES
dujo en nada efectivo. Una
serie de malas coser.has entre
1934 y 1936 con bajos rendimientos, permiti6 la absorción de existencias almacenadas,. que eventual mente resu! tar an a mayores precio.:;.
Nuevos intent os de llegar a un convenio se inicia-
ron en 19 38 -1 939 , pero cuand o
las negociaciones habían llegado a su término, 1 a guerra
había empezado.
A pesar de que - el Comité Consultivo del Tri go· no se
extinguió normalmente, _ fué
reemplazado por un Consejo
Internaci on al del Tri go, con
as i en t o en \\a s h i n g ton . De s de
agosto de 194 2 ha venido sesionando por lo me nos dos veces por año y ·su Comité Eje c utivo ha sesionado con más
frecuencia , Sin embargo· , desde marzo de 1946 no ha dado
señales de vida.
_Contrariamente a lo que
se esperaba con relación a
u-na tabla de precios · máximos
y mínimos, los países han de terminado por sí solos sus
propios precios de exportaClan. La mayoría del trigo
que se - envía por concepto de
socorrO_.
se hace sin conside-
ración alguna al Convenio .
No ha existido cooperación
a 1 gu na en t re- 1 a pro d u e e i ó n y
la política de exportación.
Esta función la ha venid o a
llenar en parte la Junta Combinada de Alimentos, creada
recientemente.
Este expediente -control
ínter-gubernamental sobre
productos de base- que en la
práctica comercial mundial,
- JORNADAS
escasos resultados ha
.d
es considerado en
pro~uclíto~lo VI de la Carta
~!' Laa)¡abana, como un método
,tan
29
· INDUSTRIALES
válido para la estabilización de p~ecios en productos
natural es.
4.- LA INDUSTRIA DEL CALZADO.
La Industria Zapatera
na e ion a 1 ,. después de h abe r
sufrido una grave c rlSlS debido a la exceslva lmportación de calzado amerlcano,
tiene ahora la oportu nldad
de mejorarse totalmente
Hasta la fecha, a pesar
de existir numerosas . fa~to•
rías, ·con
de
trabajo,
sistemas
la
te~nicos
industria
za-
patera en general no ha !orado alcanzar un desarrollo
; apenas si el 24 % de las lOversiones efectuadas corresponde~ a maquinaria, herramienta y refacciones, mlentras · que en otras ramas lndustriales este . renglón se
e 1 e va a 40 • SO y h asta 7 0 %•
todo lo cual irdica la gra n
cantidad de trabajo vivo que
en el calzado se incorpora y
por ende su elevado preclo.
Recientemente el Estado
prohibió _ la impo~tación de
calzado norteamerlcano, ellminando así la desleal competencia sobre nuestra lndustria zapatera y colocá~dola
en posibilidades de meJorar
y desarrollarse integralmente. frente a esta preocupa-
<ción del Estado, ee ne c esario que la industria del calzado se re sp.., n sabi lice • para
lo cual, debe introduclr slstema s técni cos de trab aJO,
mejorar su producci6n,mantener márgenes JUStos de beneficio,
y
revisar
~us
c ostos
como consecuen cla_ produz -
c~ en g ran escala, única for-
ma de obtener un desarrollo
sano y permanente.
Si esto s e logra , la in-'
dustria del calzado habrá
contribuido a incrP.mentar
las exportaciones de nuestro
país • pe rmi ti en do de esta manera que México pueda all~
garse mayor cant ld ad de do:
lares, tan necesarios para
la compra de materias prlmas
y equipo para otras ra mas d6
la industria • así coq¡o para
mantener el nivel necesario
de nuestras reservas en divisas extranjeras.
.
Por otra parte, es lOdispensable para el des~rro
llo económico del palS no
descuidar el fomento de aquellas industrias con exas y
subsidiarias de la zapatera.
S - VALOR DE LA rHODUCCION DE ALgUNAS I~DUSTRIAS DE
.
TRANSfORMACION EN EL ANO DE 1 . 46. .
. . d
pri~cipales 1 ndustr1as
e
Tenemos a la vista
transformación, que nos serportantes datos sobre el lm'lirin de base para constatar
lor de la producción de ;:;
30
JORNADAS
INDUSTRIALES
el crecimiento y desarroll~
de la industria en México,
~sí como para corregir las
fallas que e n el crecimiento
JORNADAS INDUSTRIAL~S
de la misma se presentan.
Las cifras so n las
guientes:
SI-
VALOR DE iA PROC L CCIOI'\ DE ALGUNAS INDUSTRIAS üE:. THANSFORMACI ON
E~ F.L A ~O DE 1946.
) 2.7~0.550.587.00
1.- Materias ~rima ~ ......... ~1 . 229.020.492. 00
2.- Mano de ob r a . . . . . . . . . . . .
474.169,584. 0C
3 .- Gasto s de l a Produ cc ;_ón. ___ lª- Q.:.Q~Q.~,.12.4,QQ
.
Costo de la Pr oducció n . ...._. . . . . . . . . . . . . . . . . ._::_?_,_Qª-L?.l.QL!QQ._QQ
ltilida d de l es Tndustriales d urante
e l ejerci c i o de 1946 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ...... )
667.340,187.00
.......
. . . . . . . . .. ..
. . . . . . . ..........
', -\LOfi DC LA PROCL.'C.ClO!'i DE ALGCNA S I NDUSTRIAS DE 1RA.\ S fORMAC:lOi\
EN EL A~O DE 1947.
~ 2.939.914.485.00
l. - Materia s !-'rim as . . . . . . . . . ~l. 388.2 66,252.00
2 .- ~!ano de obra .. . .. ..... ..
507.071.134. 00
3.- Gas¿os de Pr od uc c i ó n. ··· ~ --1!!.:.2§!LQQl.:.QQ
Costo de la Produ c ción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . l> 2.339.702.047.00
Ut ili dad de l os indu s triales durante
----------------el ejercici o d e 1947 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $
600.212,438.00
: : : : : : : : : : : : : :: ; : :
% Máx. -
Hilados y Tejidos
Azúcar . . . . . . . . . . ,
Cerveza . .. .. , ... ,
Ind. Harinera ... .
LLLI
% Máx.
;¡_ 643.877 . 942.00 23.41 S 618.799.241~00 . 21.06
" 2 8 l. 2 3 4, 6 8 9 . 00 lO. 2 2 " - 3 S S. 3 19 , 08 3 . 00 12. 09
.. 2 46 .185 . 833 . 00 8.95 .. 247.040.400.00 8.41
"23 1.7 36 ,769.00 8.42 "243.461.281-0C 8.29
% Mín.
LLLI
6 7,520 . 987.00
2.45 $
74,0l1,45S.OO
2 . 52
2 3. 19 9 , 091 .''0
O. 8 4 "
2 2. 7 8 7 , 9 S S, ()()
O. 78
r., Mín.
Cem~nto y Mat.
de
co nstruc ción ..... ~
Ropa de trabajo - ..
par a · obre r o s .. . ..
-------------------------------
d
Como p o d ra• verse después
1
anali %ar estas cifras • ~
el-;: to t al y el costo de _a
": a ducción, asi como la uti~idad obtenida p~r l~s ~~!~striales en los ano~ e
- y
1947 sufrió serios cambios.
'
y
diSAumentaron los costos
minuyeron las utilidades.
La diferencia se establece también en cuanto al
rada de desarrollo alcanzado
gor estas industriaS~ Cnmo se
ppue d e ve r en los maximos Y
ll
mínimos de 1946 y 1947 ia industria de hilados y tejidos
alcanzó un 22 %, e n tanto_ qne
la fabricación de ropa para
obreros, tan nec esar ia para
nuestras c lases trabajadoras,
apenas si 1lega a 0 . 81%. - ~s
decir, qu e la gran producc1on
dt> teias, es aprovechada en
mínima parte por la indastria na cio n a l y M~xico se ve
en la ne ces idad de importar
prendas d e vestir.
· JORNADAS
CONVENCION
INTERNACIONAL
DE
CAMARAS DE COMERCIO E INDUSTRIAS DE CENTROAMERICA,
PANAMA Y MEXICO E INSTITUCIONES AFINES
Del 9 al 14 de Septiembre
1948
P o r la imp o rtancia de este acto, damo s a
con oc er la Co nvocat o ria y el 1emari~ respectivos.
CONVOCATORIA
1
1
1
1
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1
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1
L
Considerando las necesidades comunes de tipo económico
que tienen l o s países de Centro América, Panamá y México, la
c onveniencia p o r t anto de encontrar métodos comunes que agrupen fuerzas y c o n c ilien intereses en la · resolución de dichos
proble ma s , c o nsiderand o además las afinidades de toda índole
existentes entre estos pueblos y la comunidad evidente de su
destino, y t om ando en consideración los resultados obtenid~s
durante los e s tudios de las Mesas Redondas celebradas mediante
la visita de la ~i isi ó n Industrial de Acercamiento México Ce.ntroamericano, estudios que por su propia naturaleza y la bre~
vedad con que fueron emprendidos ameritan un planteamiento más
general en que pueda reunirse un mayor acervo de datos y ~or
co~siguiente obtener una orientación más precisa sobre la labor inmediata de los sectores interesados en estructurar sobre
bases firmes y duraderas la economí a de estos países, se convoca, acatando los acuerdos emanados durante las reuniones de
~lesa Redonda ce! eh radas en esos países, a una Convención Internacional de Comercio e Industria de Centro América, Panamá
? México, en la que se abordarán los problemas económicos y
sociales que interesen por igual a esos países con la asistencia de los hombres de negocios directamente interesados en la
resolución acertada de esos problemas.
ll
l NDU STH 1.-\U:S
TEMARIO
l.- Problemas Generales de Producci~n.
· 1 : aspectos
a) Fomento Industria
nómi co.
b) Crédito.
e) Normas y calidades.
,
1· c a,
tecn
J·urídico y eco·
II.- Intercambio Comercial:
a) Importacione s y exportaciones.
b) Tarifas Interiores y aranceles.
e)
Problemas Aduanales.
III.- Transportes:
·
• _y
a) Transportes ~arítimo s : Coor dinación de la iniciati~a
del capital privados .d e Ce n t ro Amer i e a ' pan a ma y "exi e o.
b) Transportes terrestres.
e) Transportes aéreos.
IV.- Turismo:
a) Fomento del
turismo de
Panamá.
me x i e anos
-
Fomento del turismo de ·panamenos y
Mé;Kico.
.
Consorcio
e ) Creación de:
América y Panamá.
a Centro América y
centroamericanos
Turístico de México,
a
Ce,.tro
V.- Acción conjunta:
. , d
la Cámara de
Comercio e Industria s
a) Plan de Acc1on e
.
. .
. .
Panama en ~ex•co.
.
de Centro America y d C tro América y Panamá en ~eh) Creación de la Casa
e
en
xico.
en los países de Ce~tr o
Creación de la Casa de México
América y Panamá.
.
t
México-Centroame-ri ·
d) Comité Permanente de Acercamien o
34
JORNADAS
INDUSTRIALES
cano en M~xico y sus co rrespondientes en las capitales de Centro Am~rica y Panamá.
e) Creación
del "Dia del Acercamiento M~xico-Centroame
ri cano.
.H 1 E R R O M A L E A B L f
DE MEXICO
S. ele R. L. Y C. V.
VI.- Sugestiones de los seño res Delegados, relacionadas con el
temario y no incluídas en el mismo.(Ponencia libre).
VII .- Designación de la Sede de la Segunda Convención Interna cional de Cámaras de Comercio e Industrias de Centro América, Panamá y México e Instituciones afines, para 1949.
COMISION ORGANIZADOHA
El Presidente,
J o r g e M. Heyser.
Y EJECCTIVA.
e
El Vi ce -Presidente,
Antonio Arellano .
El Sec retario General,
Lic. Héctor Harona.
, e
iones d~ tuberla:
o d os, Te es 1 Reducciones,· etc.
onex
.
d
s - Llaves pMa chapds.
Esla bones pdra e~ ena .
.
. .
Re facc1ones
P ara fábricas te xtiles, azucdreras,
1
.
etc., y, en genera 1
ferrocMr l 1es ,
1 bl
Toda clase de piezas d e h·ler ro ma ea e·
1
-¡
N
por su ca, t o s han alc anza d o una gra n demanda
str o s produc
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\.
-
Materia
-
Ley de Normas Industriales
-
Devaluación
-
Petroleo
-
Industrialización
-
Persona o institución mencionada
-
Secretaría de Economía